Hará vibrar de fe y esperanza
La cantante puertorriqueña de música sacra, Christine D’Clario, se presentará en el Coliseo de Puerto Rico con un espectáculo único junto a Aaron Moses y el grupo Monte Santo
No hay nada como regresar a tu casa para cantarle a tu gente. Si de paso, tienes la oportunidad de tocar los corazones del público y llenarlos de gozo, fe y esperanza, la situación es mucho mejor todavía. Es por eso que para la puertorriqueña Christine D’Clario, regresar a un escenario tan importante como el del Coliseo de Puerto Rico para presentarse en concierto es una gran bendición.
Mañana esta popular cantante de música sacra con una larga trayectoria, presentará su espectáculo ‘ Hasta poder ver’, que tendrá como elemento especial y único que se juntará en tarima con la agrupación Monte Santo y el músico Aaron Moses, del grupo Maverick City Music. De hecho, todos compusieron una nueva canción, llamada “Corriente”, que van a estrenar y que la grabarán en vivo esa noche.
“Hemos preparado una noche en donde le vamos a dar al público una inyección de esperanza, paz y gozo, donde podrán renovar fuerzas para tomar nuevos bríos. Esto incluye a aquellos que han perdido mucho durante el huracán Fiona y para aquellos que tienen momentos de incertidumbre, que necesitan esa inyección de fe para seguir adelante”, explicó D’Clario varios días antes de llevar a cabo el espectáculo. “El concierto se llama ‘ Hasta poder ver’ y vamos a estar ahí adorando a Dios hasta ver que esas bendiciones hermosas se manifiesten en nuestras vidas”.
Además de varias canciones de las agrupaciones Monte Santo y de Maverick City, la cantante interpretará sus grandes éxitos incluyendo “Como dijiste”, “Danzando”, “Que se abra el cielo” y “Aún así”, que lanzó hace poco.
Para D’Clario, quien nació en Nueva York pero se mudó junto a su madre puertorriqueña a Hatillo cuando tenía siete años, presentarse en la tierra donde se crió es algo sumamente especial. “Cuando vengo a Puerto Rico, me siento en mi casa. Tanto es así que mis hijos lo han heredado también. Cuando llegan a la isla, se bajan del avión, los ojitos le brillan diferente”, indicó la artista, quien vive en Dallas, Texas, junto con su esposo puertorriqueño y dos hijos pequeños. “Yo les menciono el nombre de Puerto Rico y ellos enseguida empiezan a hacer las maletas solitos, porque somos de aquí como el coquí y visitar Puerto Rico, adorar con mi gente en mi casa es una sensación que no tengo en ningún otro lugar”.
De hecho, sus hijos de cinco y cuatro años están tan acostumbrados de ver a su madre cantar en vivo, que es muy común que ambos se suban a la tarima durante los espectáculos con un micrófono en la mano o con alguna guitarra de juguete.
“El grande me dice que quiere ser músico, compositor y productor, y a la chiquita le gusta que la anuncien con todos los bombos y platillos, como ‘la cantante’”, comentó D’Clario entre risas.
A pesar de que hoy día, esta cantante de 40 años tiene una sólida carrera dentro del mundo de la música cristiana, su vida de joven fue bastante convulsa debido a varios traumas que cargaba desde niña, que incluía haber perdido a su papá a los seis años y el haber sido abusada sexualmente cuando tenía cinco. Cuando tenía nueve años, D’Clario comenzó a cantar en una iglesia evangélica, por lo que rápidamente comprendió y entendió que tenía talento para la música. Sin embargo, su enfoque no fue el más adecuado.
“Cuando entré en la Universidad interamericana a estudiar música, estaba mal enfocada en convertirme en una cantante famosa. Al poner eso como prioridad, cometí muchos errores y toqué fondo en mi vida en esos tiempos. Comencé a vivir una vida falsa, en donde los fines de semana estaba en la iglesia muy santita, pero durante la semana en la universidad la historia era muy distinta”, explicó la artista, quien ha sido nominada al Latin Grammy.
“En medio de ese tiempo, cuando toqué fondo por todas las malas decisiones que tomé, Dios estaba para rescatarme y me dio una nueva oportunidad de poder arreglar mi vida, sanar mi corazón y restablecer mi alma de las heridas del pasado. Porque para sobrellevar todas esas situaciones, solamente lo pude lograr de la mano de Dios, quien tuvo gracia y misericordia conmigo. Por esa razón, entonces decidí cantar completamente para el Señor, por ese milagro tan grande que hizo de sanar mi corazón”, manifestó.
Dos años después de haber recibido el llamado de Dios para cantar música cristiana, en 2005 la puertorriqueña lanzó su primer álbum titulado simplemente “Christine D’Clario” y desde ese momento en adelante, su carrera despegó rápidamente y mantuvo sumamente consistente. “Si me hubieran dicho cuando empecé que iba a tener una carrera tan larga, con tanta influencia, con tantos seguidores y amigos alrededor del mundo, creo que me hubiese intimidado y a lo mejor me hubiera quitado”, comentó la cantante. “Porque la responsabilidad que uno tiene cuando hay muchos ojos sobre ti es muy grande, especialmente cuando estás no solamente representando tu arte, sino que estás también representando al salvador del mundo, Jesucristo. Por esa razón, uno tiene que mantener una vida de integridad y de paz, para poder inspirar a que la gente brinden la mejor versión de cada uno”.
Una vez D’Clario cumpla con su compromiso en la isla, continuará la gira por otros países de Latinoamérica, la cual se extenderá hasta diciembre. “Después de Puerto Rico, ‘Hasta poder ver’ tiene una parada en Brasil, luego voy a visitar varias ciudades en Perú y luego nos presentamos en países como El Salvador, Venezuela y México”, explicó la puertorriqueña. “Mi gira continúa hasta diciembre y estoy súper feliz, porque cuando al terminar la pandemia pensábamos que todo se iba a detener y que la gente a lo mejor no iba a tener el valor de respaldar eventos multitudinarios como antes. Nos hemos dado cuenta de que sí, de que están saliendo ahora más que nunca y de que las palabras de esperanza las necesitan ahora más que nunca”, dijo.