Sorenson invierte “millones” para auxiliar a la comunidad sorda
● Algunos servicios que estarán disponibles en Puerto Rico serán libres de costo para esta población porque la empresa recibe una subvención del gobierno federal
La empresa Sorenson, que se dedica a proveer servicios lingüísticos para la comunidad sorda, regresó a la isla con el objetivo de ampliar su alcance y convertir a Puerto Rico en el centro de su crecimiento en el Caribe, luego de salir del mercado puertorriqueño debido a las secuelas del huracán María en 2017.
El nuevo centro de operaciones de la empresa está localizado en el Edificio Tres Ríos, en Guaynabo, desde donde ofrecerán servicios de interpretación en lenguaje de señas, traducción y subtitulado.
Jorge Rodríguez, principal oficial ejecutivo de Sorenson, declinó precisar la inversión que realizó la empresa con sede en Utah, pero indicó que se trató de “millones” de dólares.
“Para nosotros (Sorenson), este centro en Puerto Rico es sumamente estratégico, no solo por apoyar la comunidad local, sino para usarlo para apoyar nuestros esfuerzos en el Caribe y para quienes usan la lengua española en todo Estados Unidos. Nuestra idea es mucho más grande en el sentido de un apoyo global a las necesidades de las personas sordas”, expresó en entrevista con El Nuevo Día.
El ejecutivo reconoció que la salida de Sorenson de Puerto Rico fue un “error”, ya que se trata de una oportunidad de mercado ideal para ofrecer sus servicios.
Estimados del Instituto de Estadísticas de Puerto Rico (IEPR) apuntan a que para el 2018, había sobre 218,495 adultos sordos o con gran dificultad para oír en Puerto Rico. La cifra no incluye menores.
SOLUCIONES PARA EMPRESAS
Además de los servicios directos para los consumidores, Rodríguez destacó que Sorenson continúa robusteciendo sus soluciones de interpretación y subtitulado para las empresas que buscan atender las necesidades de la comunidad sorda al interior de sus operaciones.
Mencionó, por ejemplo, los servicios de interpretación remota por vídeo, o VRI, que permiten hacer una interpretación completamente virtual. Esta tecnología funciona tanto para los empleados como para los clientes que acuden en búsqueda de algún servicio.
“Las empresas pueden usar el VRI en sus teléfonos o tabletas. Se integran fácilmente y la experiencia a nivel consumidor cambia totalmente”, describió Rodríguez.
Como parte de los nuevos servicios del centro, el ejecutivo indicó que ofrecerán su propia certificación de intérpretes, la cual, aseveró, es la de mayor escala a nivel mundial.
Detalló que su intención es promover la capacitación de las personas con dificultades auditivas a través de la creación de internados en diferentes empresas.
“Los niveles de impacto que podemos tener para mejorar a estas comunidades es gigantesca. Le estamos dando habilidad a las personas que están olvidadas”, acotó.