Gronk y Kelce y su efecto en la posición de tight end
Gronk aún tiene todo eso.
La juguetona y alegre personalidad que ayudó a que Rob Gronkowski se convirtiera en uno de los jugadores favoritos con Nueva Inglaterra llegó al día de prensa del Super Bowl como en los viejos tiempos.
No, no fue con esos graciosos bailes o momentos escandalosos. Pero el tight end de 31 años de los Buccaneers de Tampa Bay llegó el lunes a sus entrevistas por video con un secreto que hizo reír a todos.
Gronkowski estaba intentando ponerse en forma antes de la temporada —en la que se reencontró con Tom Brady— tras un año de retiro. Debido a la pandemia de coronavirus, los jugadores se tenían que grabar entrenando y enviar el video al entrenador de fuerza y acondicionamiento Anthony Piroli para que se les validara la actividad realizada.
Fue divertido al inicio, pero se volvió monótono para Gronkowski tras una semana. “Salía con una camiseta y luego con otra, entonces, cuando corría los sprints me grababa 15 veces en esa sesión”, admitió el jugador, que tiene 45 atrapadas para 623 yardas y siete touchdowns esta temporada. “Corría con un par de camisetas distintas debido a que sólo tenías que enviar dos o tres repeticiones”.
Clásico de Gronk: Si se le da una pequeña oportunidad, la aprovechará para escaparse, dentro o fuera del terreno.
“Todos los días es algo nuevo con él”, admitió el coach de tight ends de los Bucs Rick Christophel. “Es un placer estar con él”.
Igual que con Travis Kelce, el tight end que ha roto récords con los Chiefs de Kansas City y que tiene una gran personalidad. Sus virtudes lo tienen a la par de Gronkowksi.
Especialmente en el terreno de juego. Y a Kelce no le molesta la comparación. “Es una persona increíble, con talento, lo que sea”, dijo Kelce. “Yo creo que soy uno de sus más grandes admiradores”.