Los 50 de Mamá Inés

El personaje, símbolo del café Yaucono, celebra sus 50 años con degustaciones y actividades por toda la Isla

Este año Café Yaucono celebra los 50 años de Mamá Inés, la emblemática figura de esta aromática bebida que, desde sus inicios, se convirtió en un referente en Puerto Rico.

No podía ser de otra forma. Desde que el reconocido ilustrador, artista gráfico y periodista José Luis Díaz de Villegas creó la caricatura original, el personaje cobró vida propia, convirtiéndose en un icono de la cultura popular.

Más que nada por su pegajoso estribillo, tomado de la famosa canción ¡Ay! Mamá Inés del compositor cubano Eliseo Grenet, en la que se proclamaba “que todos los negros tomamos café”.

En la publicidad, sin embargo, se cambió la letra de la canción para indicar que “en Puerto Rico tomamos café”. Aun así, dice Díaz de Villegas, causó controversia entre ciertos sectores de la población que pensaron que el anuncio era racista porque el personaje era una negra esclava.

“En ese tiempo el publicista Pedro Misner y yo éramos socios y de Café Yaucono le habían pedido hacer el comercial y él me llamó para que dibujara el personaje. Hice toda la animación. Pero cuando las personas se quejaron de racismo, tuve que volver a dibujarla y ponerla con un color más claro. La campaña fue un éxito desde el primer momento”, recuerda Díaz de Villegas.

Precisamente, fue en 1963 cuando don Quique Jiménez, de Jiménez y Fernández, Inc., dueño de Café Yaucono en ese momento, “contrató” a Mamá Inés para ser la figura principal del producto.

“Desde entonces, Mamá Inés ha sido parte de nuestra historia”, afirma Adrián Rivera, director de desarrollo de negocios y mercadeo de Puerto Rico Coffe Roasters (PRCR), la principal manufacturera y distribuidora de café Yaucono en la Isla.

Y aunque la robusta mulata, que por años también le recordaba al pueblo en tono sandunguero que “por el gustito yo lo sé, ¡Yaucono es el mejor café!” ya no tiene la misma presencia en los medios, se mantiene como un símbolo muy importante de la marca, sostiene Rivera.

“Ya no está tan latente en la publicidad como lo estuvo en su momento. Pero se mantiene como la raíz de nuestra marca, símbolo de la cultura de pueblo”, indica el ejecutivo.

Y es que, con el pasar de los años, la figura también caló hondo en el pueblo y fue muy amada por los puertorriqueños, afirma por su parte Milmarie Giusti, gerente de mar-