REFUERZA TU AMOR PROPIO
Con la llegada del mes del amor, reconoce cuán fortalecido está el tuyo para que puedas expresarlo mejor a los demás
Apunto de comenzar las celebraciones de febrero, mes del amor, también es un buen momento para preguntarnos cómo está nuestro amor propio, ese importante estado mental que nos permite valorar nuestras vidas y aceptarnos tal como somos. Una premisa que, aunque damos por sentado, no siempre está presente. Solo tienes que preguntarte, y ser honesto con tus respuestas, si eres una persona que te autoagredes mentalmente cuando algo te sale mal, crees que no mereces los halagos que te hacen o prefieres no defender tu punto de vista por creer que no tiene importancia.
¿Cuántas veces te has dicho mentalmente que eres bruto o tonta cuando no logras hacer alguna tarea que consideras difícil? ¿Cuántas te has descrito como alguien que no es muy inteligente? ¿Estás en una relación tóxica y abusiva, pero sigues porque crees que sin tu pareja no podrás salir adelante?
Todas esas ideas o acciones tienen algo en común: se relacionan con el amor propio y la autoestima, dos conceptos que se parecen y se entrelazan, pero no son exactamente lo mismo. De hecho, los profesionales de la salud mental definen la autoestima como la confianza que tenemos como personas y el valor que le damos a nuestro aspecto físico, inteligencia, profesión, creatividad o hasta con nuestra capacidad adquisitiva. Mientras que el amor propio lo relacionan más con el valor y consideraciones que tenemos hacia nosotros mismos, no depende de quiénes están a nuestro alrededor ni de las situaciones o contextos en los que nos desenvolvemos.
Para la psicóloga clínica Thalía Cuadrado, hay una relación muy estrecha entre ambos conceptos, pero subraya que “el amor propio es un estado en el que cada persona se reconoce como única, que tiene amor hacia sí misma porque reconoce su valor y su espacio en el mundo”. Significa, además, luchar por tu propio bienestar y felicidad y no sacrificarlo para complacer a los demás. “El problema más grande que ha tenido el amor propio, sobre todo en Puerto Rico, es que aquí se ha desvirtuado mucho con el egoísmo. Sin embargo, es todo lo contrario y, porque me conozco, porque pienso en mí, porque me amo y me respeto, es por lo que también puedo hacer eso (sentir amor) por otra persona”, explica la psicóloga clínica, mientras enfatiza que si no me amo como soy, es imposible que pueda amar a otra persona.