Se puso las pilas
Diego Nazario demostró en una competición su dominio en las ciencias y matemáticas El chico de 17 años se prepara para estudiar ingeniería química en la UPR Mayagüez
Para Diego Nazario, un estudiante de cuarto año en la escuela superior Luis Negrón López de Sabana Grande, rendirse nunca fue una opción.
Luego de intentar cuatro veces ser el ganador de la Máxima Competencia de Ciencias y Matemáticas, organizada por el programa educativo Operación Éxito, finalmente logró ser galardonado durante el evento realizado recientemente en el teatro Emilio S. Belaval de la Universidad del Sagrado Corazón en Santurce.
Para este estudiante, un joven de 17 años y natural del barrio Minillas Alto en San Germán, la perseverancia es la herramienta más efectiva para alcanzar las metas.
“Desde octavo grado estaba participando. Ese año llegué undécimo lugar, después en noveno llegué tercer lugar y décimo llegué segundo. En undécimo volví a llegar tercer lugar pero ahora fue que pude ganar”, relató el joven quien, además de ser galardonado con una computadora portátil, recibió una beca de $5,000 y hasta un automóvil.
“Ahora en agosto empiezo en el Colegio de Mayagüez en un bachillerato en Ingeniería Química y pienso empezar otro en mi segundo año en Ciencias Agrícolas. El ca-
“En todos lados siempre hay una oportunidad que explotar, un talento. Queda en uno lograrlo y perseverar y hacerlo no solo para ayudarse a sí mismo, sino para ayudar a los demás y al País. Hacerse sentir…” DIEGO NAZARIO Ganador de la Máxima Competencia de Ciencias y Matemáticas
rro me viene muy bien porque me facilita llegar a la universidad”, añadió el elocuente joven.
No obstante, este joven sangermeño aseguró que la tarea de prepararse para la competencia no fue sencilla y requirió muchas horas de estudio.
“Tuve que estudiar muchas horas frente a la plataforma de Operación Éxito contestando cientos de preguntas. Como son muchos los cursos uno no tiene el tiempo real para leerse todo así que lo que hice fue concentrarme en las cosas más básicas que más o menos uno sabe que van a venir”, explicó el joven estudiante.
Diego, producto del sistema público de enseñanza del País, aseguró que las limitaciones son impuestas por las propias personas y que no hay límites para la capacidad de desarrollar el talento de cada joven.