ESPERAN POR PATÓLOGO PARA QUE ARROJE LUZ
En el apartamento del abogado fallecido en el Condado no hay puertas ni cerraduras forzadas
Las autoridades han solicitado las imágenes de una cámara
La muerte del abogado Manuel López Bonelli, quien fue encontrado tirado en su habitación en el condominio Playa Grande en el Condado, San Juan, en medio de un charco de sangre, con una herida abierta en el lado izquierdo del cuello y otra en la muñeca, pudiera ser objeto de varias teorías investigativas, incluido el asesinato.
López Bonelli vestía casual, un pantalón corto sin camisa. Al lado de su cuerpo había un paquete de navajas de un filo y medicamentos controlados.
“Era una persona que vivía solo, padecía de depresión”, dijo ayer la teniente Wanda Torres, oficial administrativa del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de San Juan.
Fue un amigo de la familia, Pedro Juan Carlos Vélez, quien se percató de que el abogado lo llamó el sábado cerca de las 12:30 de la tarde, escuchándose solo quejidos.
Vélez llamó a la familia y fue atendido por la cuñada del occiso, la fiscal de Carolina Laura Hernández, y su hermano, el ex fiscal Pedro López Bonelli, indicó la fiscal de distrito Sonia Otero.
El abogado de 46 años, divorciado, con una hija menor, llevaba residiendo tres años en el exclusivo condominio que da a la playa.
“Se ha solicitado prueba documental, lista de empleados de mantenimiento y de seguridad e imágenes de una cámara. La investigación está iniciando”, dijo Otero.
El agente a cargo de la investigación, Javier Jiménez Mu-
“Nosotros la trabajamos pensando lo peor y poco a poco se van descartando ángulos, con la ayuda del patólogo, como si fuera un crimen, con todos los ángulos de un asesinato y luego se van descartando
los ángulos”
JAVIER JIMÉNEZ MUÑIZ
Agente investigador
ñiz, se encontraba ayer en el condominio donde ocupó el libro de entrada y salida de visitantes.
“Estamos en la etapa de entrevista. El hermano fue en la mañana a identificar el cuerpo”, dijo Jiménez.
“Hasta ahora, es una muerte sin determinar porque no hay nada forzado, ni puertas, ni ventanas forzadas. Se investigan todos los ángulos”, dijo.
Indicó que entrevistó a los guardias y a la mucama del occiso.
El condominio tiene dos salidas: la del frente y la del estacionamiento.
Al preguntar sobre la posibilidad de que alguien brincara la verja, el agente comentó que “era complicado pues la verja tiene como 16 pies”, por lo que, si alguien entró, tiene que haber entrado por el frente.
Y si entró por el frente, tuvo que firmar el registro de visita. Si llega acompañado de un inquilino se verá en el vídeo de las cámaras del condominio.