Recolectan artículos de primera necesidad en el Club de Leones de Mayagüez
Mayagüez. En el calor de un árido suelo y bajo la sombra de un árbol, sor Didi Jiivaprema comenzó a reunir niños “realengos” en un pueblito de Puerto Príncipe en Haití, para enseñarles a leer y cómo superarse.
La iniciativa que comenzó esta monja española en 1997 creció, y ya ha logrado fundar cuatro escuelas bajo la organización mundial Ananda Marga que significa “camino a la felicidad”.
Al día de hoy asiste a más de 800 niños y sus familias. Mediante recursos paupérrimos, se vale de donaciones y el trabajo voluntario de muchos.
Con su hábito color naranja brillante, esta monja practicante de la fe y la disciplina yoga, explicó que cuando comenzó su proyecto de educación en Haití, “eran como 50 niños”.
“Trabajamos para conseguir una tierra y empezamos a construir poco a poco. Así fue creciendo y nos fuimos a la frontera con República Dominicana (en el 2006) donde se abrió la segunda escuela con cuatrocientos niños”, explicó Didi, que significa monja.
“Una tercera escuela fue levantada en un campamento de refugiados (después del terre- moto de 2010) y hace poquito se disolvió. Sus niños se unieron a la escuela de Puerto Príncipe y otra cuarta escuela se logró en un pueblito de la frontera, en un terreno donado por el gobierno”, agregó.
En una estructura construida en metal y palos, mantiene la educación de cientos de niños. Pero el pueblito no tiene agua, por lo que la escuela no tiene ni siquiera baños.
“Es uno de los motivos por los que vengo en esta época a Puerto Rico, porque queremos hacer un cuartito para hacerles un bañito. También ver cómo se podría solucionar el problema del agua, porque es difícil, pues lo único que tienen es un río cerca, como a tres kilómetros. Los niños traen sus galoncitos para ayudar en la escuela con los niños chiquitos de tres años, que hay que limpiarlos”, explicó.
La misión de Didi es identificar alguna entidad con los recursos necesarios para cavar un pozo de agua en este pueblito conocido como “Ganano”, pues por lo remoto de su ubicación, no se ha logrado conseguir alguien capaz de transportar equipos pesados para cavar el pozo u ofrecer alternativas para que sus residentes puedan tener acceso a un servicio tan esencial como lo es el agua potable.
Didi destacó que como parte de la misión que ocupa por los últimos 17 años en Haití, ha tenido que formar talleres de ayuda social, para garantizar el desarrollo integral de los ni- ños, pues la familia es la base.
Por tanto, mediante cooperativas trabaja en grupos de 20 mujeres en un programa diseñado para que estas puedan obtener una dependencia económica y motivarles a ahorrar. Actualmente cerca de 500 mujeres están adscritas al programa. “Me inspira, porque si no hay mucha ayuda de afuera, ellas mismas se ayudan”, acotó.
RECOLECTAN ARTÍCULOS DE NECESIDAD
Otro de los proyectos que ha tenido que desarrollar es un hogar para niños sin padres. Allí hay unos 14 niños de entre las edades de dos años a 9. En octubre está por recibir un bebé que está por nacer.
Por lo pronto, la Fundación Neohumanista y voluntarios en el oeste levantaron un centro de acopio en el Club de Leones de Mayagüez (ubicado en la carr. PR 2 km 15.2.), donde se estará recibiendo materiales de primera necesidad.
Se solicitan medicamentos para niños, vitaminas, pañales desechables, fórmula de bebe, ropita de recién nacido, corrales portátiles de bebé (tipo sombrilla), zapatos (preferiblemente negros escolares), cepillos de dientes, pasta de diente, mochilas escolares para niñas y niños, juguetes educativos, triciclos y bicicletas pequeñas, entre otros.
Asimismo, donativos para comprar sacos de lentejas, garbanzos, habichuelas, harina de garbanzos, arroz, y otros alimentos secos que ellos usan.
Para ofrecer su ayuda puede escribir a: elisavelez23@ gmail.com ó a Jiivaprema@hotmail.com. También puede llamar a la Fundación Neohumanista al 787-808-0568 ó para hacer entregas en el Club de Leones de Mayagüez al 787-831-4489 de lunes a viernes de 8:00 a.m. a 3:00 p.m.