SIRENA EN BUSCA DE UNA PISCINA
Ante la falta de piscinas disponibles para entrenar, la nadadora boricua Vanessa García intentó recurrir a las playas isleñas, pero entonces encontró que en muchas de ellas las aguas no son aptas para nadar.
El dilema de García es el mismo de muchos atletas después del huracán María: instalaciones deportivas inhabilitadas o destruidas y un plan de entrenamiento obstaculizado por eso.
García, quien ha nadado en cuatro Olimpiadas, habló con Primera Hora sobre la realidad de los atletas boricuas en tiempos pos María y presentó las dificultades que enfrenta.
Primero aclaró que, por lo general, le dedica esta etapa del año al trabajo físico fuera de las piscinas. Por ese lado, no se ha atrasado, agregó.
“Es lo que hago normalmente”, dijo mientras participaba de la actividad ‘Moviéndonos por los Nuestros’ en Utuado, junto al Comité Olímpico de Puerto Rico y la tenismesista Adriana Díaz.
Pero dijo que junto al trabajo físico en el gimnasio necesita mantener contacto con el agua, y que no tiene una piscina para entrenar ya que la que usualmente utiliza en Barceloneta está inhabilitada por falta de electricidad. Para colmo, agregó, que las playas no le han servido de alternativa porque muchas portan bandera roja, que avisa sobre aguas contaminadas.
“Eso hay que respetarlo”, dijo. Mientras, sin piscinas, sin playas y llegando a los meses en que nadar es parte esencial del entrenamiento, la llamada ‘sirena boricua’ dijo que hace gestiones para usar alguna de las pocas albercas habilitadas. “Para enero ya voy a necesitar una piscina estable”. Se espera que García esté activa este verano en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018.
Otros atletas no se han quedado sin entrenamientos, pero sí carecen de trabajo. Ese es el caso de los voleibolistas Raymariely Santos y Jessie Colón, quienes también participaron de la actividad en Utuado.
Sin taller en el voleibol
Ambos están sin trabajo porque, sin canchas aptas para poder jugar, el Voleibol Superior canceló sus torneos hasta próximo aviso.
Sobre Santos muy bien se podría decir que se quedó sin trabajo en un buen momento, cuando se rehabilita de una reciente operación en su mano derecha. Pero el asunto no es tan conveniente como se puede pensar.
“Lo lamento igual porque son experiencias que uno se pierde. Pero Dios tiene su propósito. Si este era el momento para tomar el descanso, respetar más mi cuerpo, pues se respeta”, dijo Santos, quien fue acomodadora titular de la Selección Nacional durante el verano pasado.
Mientras, Colón tiene al menos un trabajo secundario del cual vivir. Pero igual sintió el golpe.
“Gracias a Dios tengo un trabajo con el municipio de Utuado, pero es un golpe porque mi mayor ingreso es el voleibol. Todo el mundo tiene que hacer ajustes”, dijo el central de los Indios de Mayagüez y de la Selección Nacional en Veracruz 2014.