AEE REPARA LOS REMIENDOS QUE DEJARON OTROS
Empleados denuncian que las chapucerías hechas por las brigadas privadas ponen en peligro sus vidas y las de los clientes
Llegaron para ayudar a reparar los daños en la red eléctrica en momentos de gran necesidad. Pero no todas las briga- das trabajaron con el mismo cuidado y el resultado es que ahora los obreros de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) están teniendo que regresar a zonas que se consideraban arregladas, a corregir trabajos incompletos, mal hechos o que podrían incluso considerarse chapucerías.
Los deslices, además, en algunos casos han costado a clientes pérdidas de equipos, y más días sin electricidad con las consiguientes molestias y gastos adicionales en compra de combustible para generadores.
Por supuesto, el hecho de que brigadas tengan que volver a áreas que se daba por sentado que ya no tendrían problemas, retrasa todavía más los trabajos que podrían hacerse en otros lugares que van ya para seis meses sin servicio.
Y por si fuera poco, estas actividades también ponen en peligro la vida de los obreros de la AEE que tienen que regresar a laborar en áreas que ya están energizadas.
La recurrencia de estas reparaciones por todas partes llevó a varios empleados de la AEE a denunciar trabajos que “son una chapucería en cualquier liga”, y que consideran han quedado como resultado de mala supervisión y ejecuciones que no son aceptables en ningún lugar.
“Esa situación es la norma”, explicó el empleado de la AEE que prefirió no identificarse para evitar posibles represalias. “Hemos tenido que ir a muchos lugares dos veces porque las cosas están mal hechas”.
De acuerdo con el denunciante, han encontrado malos trabajos en varios puntos del Viejo San Juan, Santurce, Villa Borinquen, la avenida Piñeiro, entre otros. En un caso, en la
Eso para nosotros no es permisible. Si hacemos un trabajo así, nos botan”
ANÓNIMO
EMPLEADO DE LA AEE
Eso no estaba bien hecho, y como hicieron una basura, ahora hay que rehacerlo”
ANÓNIMO
EMPLEADO DE LA AEE
urbanización Muñoz Rivera, plantaron un poste frente a una casa en la calle Escarlata y le pasaron líneas primarias por encima a la residencia, lo cual va contra las normas y es un serio peligro. Primera Hora ha recibido además denuncias y fotos de otros lugares a través de toda la Isla, con líneas colocadas sobre árboles y otros “arreglos” impensables.
“Esas cosas que hemos visto. Eso para nosotros no es permisible. Si nosotros hacemos un trabajo así, nos botan”, indicó el denunciante, agregando que ellos siempre que acaban un trabajo preguntan a los clientes para asegurarse “de que no se quede nadie fuera. Y hemos visto lugares que no se ha hecho. En Santurce, en un área bien pobre, dejaron dos callejones desconectados”.
“Debo aclarar, no es que no apreciemos su ayuda. Hay brigadas de ellos que sí trabajan superbién. Y si ellos no hubieran venido estaríamos mucho más chava’os. Pero hay otras brigadas que hemos tenido que ir detrás reparando porque no han hecho un buen trabajo. Y uno lo que dice es, ¡Pero car…, hagan el trabajo bien! Tienen los recursos para eso”, insistió.
“A ellos les pagan $70 a $80 por hora, mientras que a nosotros es $18 a $20; a esa gente le daban $125 de dieta, mientras que a nosotros nos dan $8 y no nos la pagan desde Irma; entonces, ¿tú crees que es que para que hicieran eso tan mal?”, cuestionó.
“Estamos molestos. Nosotros mismos, muchos no tenemos luz. A mí me llegó el viernes, a un compañero le llegó ayer (anteayer). Tenía unos vecinos que me tenían loco preguntando, me esperaban hasta la noche, velándome para preguntarme”, agregó.
“Con toda la gente que vino aquí, era para que ya se hubiera arreglado toda la Isla. Pero aquí no hay un plan de trabajo. Esto todo es político”, lamentó.
Primera Hora, de hecho, fue alertado de que este martes se haría una reparación en el Viejo San Juan, una zona donde se restableció la luz con bombos y platillos luego de llevar allí un batallón de brigadas, después que los comerciantes de la zona reclamaran la necesidad de energía eléctrica para poder mantener con vida sus negocios.
Allí, constatando lo que se denunciaba, encontramos varios obreros trabajando en la calle Fortaleza, donde un tramo se había quedado sin luz, luego que fallara un empate con una soga de un cable a una cruceta oxidada que debió ser reemplazada. De hecho, todo el arreglo en ese poste estaba defectuoso. El fallo les había costado otros dos días sin energía eléctrica a los comerciantes y vecinos del área, donde otra vez retumbaban los generadores en cada puerta.
“El gasto en combustible ha sido demasiado. He gastado unos $30,000 en gas para la planta. Y es un gasto adicional, inesperado, que no voy a recuperar”, lamentó un comerciante en los bajos de donde se llevaba a cabo la reparación. “Yo sobreviví por la planta, y porque vendo bebidas. Si no me j... como le ha pasado a otros”.
Arriba, mientras, laboraban los obreros, luego de tener que cerrar la vía por completo para poder colocar un camión con un brazo que permitió que la reparación no tardara tanto. De cualquier forma, les tomó al menos unas tres horas de la tarde cambiar las dos crucetas oxidadas por otras nuevas, así como otras piezas de la conexión.
“Eso no estaba bien hecho, y como hicieron una basura, ahora hay que rehacerlo”, comentó uno de los obreros que reparaba.
“Las compañías privadas hicieron un trabajo, ellos no tienen la culpa. Pero los inspectores y supervisores de la AEE no lo hicieron, no certificaron el trabajo”, lamentó otro celador.
Para otro obrero, sin embargo, la culpa es también de los que trabajaron antes, “porque hay unos estándares, que cualquier celador conoce, que está adiestrado para eso”.
Sea cual sea el fallo, lo que parece revelarse con el paso de los días es que no en todo los casos se pagó por el trabajo adecuado, y por tanto los trabajadores de la AEE tendrán que volver sobre lo que se creía ya un problema superado.
Primera Hora procuró una reacción de la AEE, pero la corporación pública, a través de su oficial de prensa Carlos Monroig, pidió tiempo para inspeccionar las áreas y emitir declaraciones al respecto.