Clave en su rol

En los deportes de conjunto, obviamente hay siempre como mínimo un jugador estelar, incluso a veces puede que haya dos, tres, cuatro y/o hasta cinco, y quién sabe si más. Pero, todos, absolutamente todos, no pueden ser estrellas del mismo nivel. Eso es un hecho. De lo contrario, imagínese usted.

Un ejemplo de esto que le digo, es el equipo de baloncesto los Warriors de Golden State en la NBA. Cinco atletas de primer nivel en su cuadro regular y otros complementarios. Esos complementarios, unos mejores que otros, son clave en la ejecución y en lograr resultados de esfuerzo.

Así las cosas, hoy traigo a colación el esfuerzo y pasión del jugador de 30 años de los Piratas de Quebradillas, Tyler Polo, uno, que en seis años en el BSN, nunca ha sido un jugador consistente del cuadro regular y sí más bien un jugador del banco, que sale con un rol específico en cada juego.

Pero, este año, ha sido punta de lanza de los Piratas, ha aportado muy buenos minutos, en donde incluso, varias veces, ha iniciado en el cuadro regular.

Al no ser un jugar de impacto, de esos regulares de los que uno espera una aportación mínima de puntos y rebotes y detalles defensivos, Polo pasa bajo el radar. De hecho, su aportación es más que motivadora para el resto de sus compañeros.

Polo lleva seis temporada en el BSN y este año con los Piratas ya suma su mayor cantidad de puntos logrados en una temporada. Lleva 83 puntos en 19 partidos para promedio de 4.3 por juego. Ha capturado 36 rebotes para promedio de 1.9 y se ha destapado como un buen tirador del área de tres, al menos en consistencia, con 19 triples en 35 intentos para un por ciento de 54%.

Polo, como todo prototipo de su clase, es un ente de unión en su equipo, ni exige ni pelea por minutos de juego. Más bien sale a ganárselos cada noche.

Y por eso, es que ellos, los jugadores complementarios, son tan importantes como los regulares.

“Los jugadores complementarios, son tan importantes como los regulares”