OTRO NO A LA GUARDIA NACIONAL
Gobernador rechaza nuevamente la activación de militares para reforzar la seguridad, como han pedido alcaldes
El gobernador Ricardo Rosselló rechazó que activar la Guardia Nacional para ayudar a combatir el crimen sea una opción que esté bajo su consideración en este momento, pese a los reclamos que han hecho varios alcaldes recientemente, incluyendo al ejecutivo municipal de Toa Baja, Bernardo ‘Betito’ Márquez, en cuyo pueblo se registraron cuatro asesinatos entre el sábado y el lunes.
En lugar de tomar medidas a corto plazo, el gobernador apuesta a iniciativas como la creación de la academia de la Policía, que no se prevé esté operando al menos hasta febrero de 2019.
“Ahora mismo no estoy considerando (activar la Guardia Nacional), pero como siempre he dicho, es una alternativa que está ahí y si en mi juicio como gobernador entiendo que la tengo que usar la ejecutaré”, indicó el gobernador.
“La alternativa que yo le propongo (a los alcaldes) es la alternativa que ya estamos trabajando, que es la reforma de la Policía. Una reforma que nos permita tener más policías en la calle (por) más tiempo, que le quite el peso administrativo a los oficiales y les permite combatir el crimen. Nos vamos a tener que fijar cómo vamos a tener más policías en la calle, y en dónde vamos a tener más patrullas”, dijo Rosselló.
Fue la segunda vez que Márquez solicita la activación de la Guardia Nacional, pues ya en septiembre había realizado una exigencia similar.
“Soy el primero en reconocer que tenemos que hacer más pero la comparativa con la dirección hacia la que estamos llevando esto y el momento de llamar a la Guardia
Nacional, eso siempre va a estar a la disposición del gobernador. Pero vamos a trabajar con esta reforma, con estas iniciativas y tener una estrategia sostenible para combatir el crimen, no algo que meramente de manera temporera pueda mitigar ese efecto”, señaló Rosselló.
Tiempos duros
Aunque el gobernador admitió que los miembros de la Policía se enfrentan al momento a unas condiciones precarias, aseguró que las iniciativas que se han implementado y se
estarán trabajando en el futuro cercano serán suficientes para darle un giro a la realidad laboral de los oficiales de orden público.
“Yo considero que son unos tiempo de retos, pero que estamos trabajando para mitigarlos. En la administración pasada hubo una reducción en el retiro, eso sin duda afecta. Hemos tenido que ajustar una serie de cosas para llegar a un balance fiscal. Pero es importante que la ciudadanía y la policía sepa que estamos buscando iniciativas puntuales para trabajar y ayudarlos a
progresar”, dijo Rosselló.
Junto a la creación de la academia, Rosselló resaltó otras medidas que su administración ha tomado para mejorar las condiciones de los policías, como el aumento de $1,500 anuales, la habilitación del programa que les permite a los miembros de la Uniformada laborar como guardias de seguridad en su tiempo libre e iniciativas para que se desarrollen académicamente. El primer ejecutivo también prometió la compra de “cientos” de patrullas nuevas que faciliten las labores de seguridad.