LE SALE CARO A GUAYNABO
Municipio tendrá que pagar más de $1 millón por caso de hostigamiento sexual del hijo del exalcalde, Héctor “El Cano” O’Neill Alcalde Ángel Pérez buscará demandar a los responsables porque, “Guaynabo no merece pagar por sus actos ilegales e inmorales”
Con un veredicto unánime y contundente, el jurado falló a favor de la abogada Inés María Jelú Iravedra, en el caso que llevó en el tribunal federal por hostigamiento sexual y laboral contra el municipio de Guaynabo y Héctor “El Cano” O’Neill Rosa, hijo del exalcalde Héctor O’Neill.
“Espero que esto sea un ejemplo para las mujeres que están sufriendo en estos momentos este tipo de situaciones. Que pueden tener justicia”, afirmó Jelú Iravedra.
Luego de unas ocho horas de deliberaciones, el jurado, conformado por cinco hombres y tres mujeres, en su mayoría jóvenes, respondió ante el juez federal Raúl Arias Marxuach unánimemente en favor de la demandante todas las preguntas de la lista que tenían ante sí para emitir un veredicto. Determinaron que O’Neill Rosa sí había hostigado sexualmente a Jelú Iravedra; que dicho hostigamiento creó un ambiente laboral hostil para ella; que el municipio sabía o debía saber que existía ese ambiente laboral hostil; que el ayuntamiento, a través de supervisores o personas con autoridad para recibir, atender, reportar y actuar sobre la queja de hostigamiento sexual no actuaron de manera adecuada para remediar la situación y eliminar el ambiente laboral hostil.
Asimismo, los miembros del jurado determinaron que Jelú Iravedra sufrió daños por el ambiente laboral hostil al que era sometida; que el municipio tomó represalias contra ella; que Jelú Iravedra sufrió daños por el hostigamiento consecuente de esas represalias; y que el municipio terminó despidiéndola
“
Es bueno que sepan toda esa gente en posiciones de poder ahora mismo, que no pueden abusar de sus subalternos, que hay justicia”
INÉS MARÍA JELÚ IRAVEDRA DEMANDANTE
porque le impuso unas condiciones laborales tan intolerables que cualquier persona razonable en su situación habría considerado suficientes como para dejar ese trabajo.
Por último, el jurado consideró que Jelú Iravedra sufrió daños por ese despido; y que debía ser compensada por los daños, el dolor y las angustias mentales que sufrió. La cifra de dicha compensación fue fijada por el jurado en $1,011,593.
No obstante, el ayuntamiento terminaría pagando alrededor de $2 millones, una vez se sumen otras partidas y los honorarios de los abogados de la demandante.
“En todo, en todo, fallaron unánime y en favor de nosotros”, agregó Jelú Iravedra, quien extendió un agradecimiento a Dios, sus abogados y el jurado.
“Espero que de ahora en adelante tengan una política diferente a la que había anteriormente”, agregó la abogada, aludiendo al municipio de Guaynabo.
“Inés (Jelú) ganó el 2015, el día que ella decidió defenderse y darse a respetar, y parársele de frente al abusador. Ya ese día ella ganó”, afirmó el abogado Pedro Vázquez. “Esta es la culminación de un proceso donde vimos el poder político estar aquí, asomando su cabeza oscura, donde mucha gente aquí colaboraron para permitir que eso estuviese en perpetuidad por mucho tiempo, y ella fue la que lo desarticuló”.
Por su parte, el abogado del municipio, Claudio Aliff Ortiz, se limitó a decir que “esta es la expresión del jurado y obviamente hay que acatarla en la etapa procesal que está”, pero anticipó que “existen otras etapas procesales que las vamos a agotar. Hay mecanismos que tenemos que agotar antes de la apelación”.