CALIFORNIA RECIBIRÁ REFUERZOS
En camino el barco hospital de la Marina
LOS ÁNGELES. El buque hospital USNS Mercy de la Marina estadounidense partió ayer hacia Los Ángeles para proporcionar una mayor capacidad médica a la ciudad californiana a medida de que aumentan los casos de contagio del COVID-19 en el país.
Originalmente, se esperaba que el USNS Mercy, uno de los dos barcos de 1,000 camas hospitalarias de la Marina, fuese a la región de Seattle, una de las más afectadas de la nación, pero el gobernador de California, Gavin Newsom, suplicó al presidente Donald Trump que lo enviase a Los Ángeles.
En una sesión informativa del Pentágono ayer, el secretario de Defensa, Mark Esper, argumentó que fue la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés) la que finalmente determinó el destino de la embarcación, que normalmente se encuentra en San Diego (California).
“Los hombres y mujeres del Mercy son profesionales altamente capacitados y están ansiosos por unirse a esta lucha para comenzar a ayudar a sus compatriotas estadounidenses”, dijo Esper, que señaló que el buque atracará en la ciudad angelina esta semana.
En este sentido, el administrador de FEMA, Peter Gaynor, explicó que sus previsiones apuntan a que California necesitará más atención médica en las próximas semanas que el estado de Washington.
“A pesar de que hay más casos en este momento en Washington, las necesidades proyectadas de camas en California son cinco veces más que las de Washington”, apuntó en un comunicado de prensa.
De acuerdo con FEMA y la Marina, el buque Mercy se utilizará para tratar a pacientes que no padecen COVID-19, con el objetivo de liberar a los profesionales de salud locales para tratar a las personas infectadas con el coronavirus.
El otro barco de las Fuerzas Armadas con la misma capacidad, el USNS Comfort, se dirigirá a Nueva York en abril desde su puerto base en Norfolk (Virginia), porque actualmente se encuentra en fase de mantenimiento.
Además del desplazamiento de estas dos embarcaciones, Trump anunció el domingo recursos adicionales para el estado de Washington, incluyendo cuatro estaciones médicas federales con 250 camas y tres con 750. Hasta ahora se han registrado 409 casos de contagio y cinco muertes en el condado de Los Ángeles por COVID-19, de acuerdo a datos oficiales, mientras que en California en su conjunto hay más de 1,700 casos confirmados y 35 fallecimientos.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la pandemia ha provocado 332,935 contagiados y 14,510 muertos en 190 países, de los que 33,404 infectados y 400 fallecidos se localizan en EE.UU.
Semana fundamental
En medio de una escasez de mascarillas, respiradores y buena voluntad política, más de una quinta parte de la población mundial está bajo órdenes de quedarse en sus casas, en el comienzo de lo que podría ser una semana fundamental en la lucha para contener el brote del nuevo coronavirus en EE.UU. y Europa.
Las divisiones partidistas estancaban las labores para aprobar un enorme paquete de ayuda en el Congreso estadounidense, y los precios de las acciones cayeron en Wall Street, incluso después de que la Reserva Federal dijo que prestará dinero a las pequeñas y grandes empresas y a los gobiernos locales para ayudarlos a salir adelante.
Alertando que el brote sigue acelerándose, el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió a los países tomar medidas enérgicas y coordinadas. “No somos observadores inermes”, comentó, y añadió que tomó 67 días alcanzar los 100,000 casos a nivel mundial, pero sólo cuatro para ir de 200,000 a 300,000. “Podemos cambiar la trayectoria de esta pandemia”.
La lucha para reunir recursos de salud pública y políticos se intensificó en Nueva York, donde un cierre a nivel estatal entró en vigor en medio de temores de que la ciudad de 8.4 millones de habitantes se está convirtiendo en uno de los brotes más grandes del mundo, con 20,875 casos positivos a COVID-19 y 157 muertes.
“
Los hombres y mujeres del Mercy están ansiosos por unirse a esta lucha”
MARK ESPER / SECRETARIO DE DEFENSA