BARBERÍAS Y SALONES DE BELLEZA
ESTOS PODRÁN OPERAR MEDIANTE CITA PREVIA y no podrá haber personas en las salas de espera. Los empleados deberán usar mascarilla, lavarse las manos frecuentemente y también se deberá respetar el distanciamiento social entre las estaciones de trabajo. La orden ejecutiva establece que el dueño, encargado, administrador o persona designada, será la responsable de desinfectar los artículos de belleza que utilizará con el cliente antes de prestar el servicio.
El mayor riesgo en este segmento principalmente es a través del contacto cercano de persona a persona con personas infectadas y, en menor grado, entrar en contacto con sillas de salón y herramientas que podrían tener partículas de virus.
Aunque los CDC no abordan medidas específicas para este tipo de negocio, un grupo de profesionales de la industria de la belleza local, autodenominado como PSWS COVID-19 Beauty Task Force, anunció la elaboración de un documento llamado “Guía de Control y Protección de Exposición a COVID-19 para los Trabajadores de Servicio Personal (PSWS)”, tomando en cuenta las recomendaciones del Departamento de Salud de Puerto Rico, el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos y los CDC. De otra parte, entidades nacionales, como la Asociación Americana de Higiene Industrial han brindado una guía detallada para los salones de belleza y uñas, que incluye reducir el número de clientes que están en la tienda en cualquier momento, limitando la interacción cara a cara, al pararse detrás del cliente en todo momento y usar un protector facial o una máscara, así como practicar el lavado y la desinfección de manos en todo momento.
¿QUÉ PUEDES HACER PARA PROTEGERTE?
Llama o comunícate por correo electrónico, entre otros medios, para verificar sus reglas de operación y sacar una cita.
Espera en tu vehículo a ser llamado para tu turno.
Desinfecta tus manos al cambiarte de silla o estación de trabajo y luego de realizar algún pago, no importa si es en efectivo, tarjeta de débito/crédito o cheque.