La vacuna contra el COVID-19 salva vidas
Si se realiza una adecuada programación y las personas respetan las fases de vacunación, podremos alcanzar a inmunizar del 80 al 85% de la población
Solo algunos países en el mundo tienen, hasta la fecha, el privilegio de contar ya con suministros de las vacunas para evitar el contagio por COVID-19 y Puerto Rico es uno de los privilegiados en medio de esta pandemia. Si se realiza una adecuada programación y las personas respetan las fases de vacunación podremos alcanzar a inmunizar del 80 al 85% de la población, que es la meta final, y, con ello, salvar muchas vidas de ciudadanos y de profesionales de la salud, siendo estos últimos los más expuestos al contagio.
Puerto Rico comenzó a vacunar el mismo día que los Estados Unidos y todavía allá hay estados que aún no han comenzado. Con casi 100,000 personas vacunadas, Puerto Rico tiene más ciudadanos vacunados que 45 estados y el Distrito de Columbia.
INVERSIÓN PROSALUD
Casi $12,400 millones se invirtieron para hacer posible que las farmacéuticas trabajaran en una vacuna para atender la pandemia por COVID-19. Más de una treintena compitieron y, de esas, cuatro produjeron vacunas factibles. Dos ya han recibido una autorización de emergencia y están siendo administradas. La vacuna producida por la farmacéutica Pfizer-biontech tiene un 95 % de efectividad y la del laboratorio Moderna, un 94.1 %. Su seguridad y efectividad están probadas. En camino está la del binomio conformado por Johnson & Johnson y Astrazeneca-oxford.
SIMILITUDES Y DIFERENCIAS
Entre las dos vacunas que se administran masivamente en Estados Unidos, México, Chile y la Unión Europea existen similitudes y diferencias. Estas vacunas salen de la parte genética del virus y no del núcleo. No contienen el virus vivo. Al inyectarse desencadena una respuesta inmunitaria para producir anticuerpos que protejan el organismo en caso de entrar el virus al cuerpo. Ambas requieren dos dosis para alcanzar su efectividad. La vacuna de Pfizer-biontech debe administrarse la segunda dosis a los 21 días y, en el caso de la de Moderna, a los 28 días. Ambas dosis deben ser de la misma farmacéutica. La autora es decimocuarta cirujana general de los Estados Unidos y portavoz de VOCES Coalición de Inmunización y Promoción de la Salud de Puerto Rico.