MUY DIFÍCIL GANARLE LA GUERRA A LOS FANÁTICOS
El expelotero Carlos Delgado opina sobre la controversia de los Mets por los gestos de Báez y Lindor
El expelotero de los Mets de Nueva York, Carlos Delgado, reconoció hoy lunes que Javier Báez y Francisco Lindor están en su derecho a estar frustrados, cansados de oír abucheos e incluso de poder expresar sus emociones, pero agregó que dirigir sus corajes hacia la fanaticada no es la manera correcta de responder al asunto.
Primera Hora consultó a Delgado sobre este tema un día después que Báez y Lindor hicieran gestos de desaprobación a aplausos de la fanaticada de Nueva York hechos en moda de críticas de parte de los jugadores por los abucheos que han recibido por bajas producciones en la caja de bateo con el uniforme de los Mets.
“Son situaciones bien delicadas porque hay una emociones y frustraciones. Pero no pienso que la mejor manera es desquitarse con el fanático. Esa es una guerra difícil de ganar, especialmente en Nueva York”, dijo Delgado.
“No le estoy quitando valor, ni sentimiento, ni siendo incomprensivo a la frustración de los muchachos porque a nadie le gusta que lo abucheen; a mí me abuchearon en Nueva York y sé lo que se siente. Pero quizás tú puedes escoger otras maneras de liberar esa frustración y bregar con la situación. Ahí no llevan las de ganar y esto va a ser una distracción grande para ellos”, agregó Delgado.
Delgado añadió que la fanaticada de los Mets seguirá abucheando al equipo si no comienza a ganar juegos con consistencia y a los jugadores si no se desempeñan bien. Aseguró que así continuará la situación aunque los peloteros se disculpen públicamente con la fanaticada.
De hecho, la gerencia de los Mets ha dicho que el acto de Báez, Lindor y otros jugadores es es inaceptable.
Delgado recomendó que “dar palos” es la mejor manera de cambiar los abucheos por aplausos y apoyo.
“Lo que les deseo es que puedan aprender de ésta, que digan ‘vamos a meter palos’. Esto es parte de la jugada. Si no nos va muy bien, tenemos que aguantar un poco de presión y buscar la manera de seguir mejorando. Creo que esa es la mejor actitud porque en Nueva York esto va a seguir creciendo”, dijo al tiempo que contó una anécdota suya que tuvo que ver con Carlos Beltrán y la fanaticada de los Mets en el 2006. Resaltó que ocurrió en el primer día de la temporada, en el primer turno de Beltrán, sin que el juego estuviera en la raya. Beltrán dio un bombo al siore con hombre en segunda y fue abucheado.
Delgado esperaba en el círculo de espera para consumir el primer turno de su carrera con los Mets cuando escuchó el abucheo y dijo: “Diablo. En dónde rayos yo me metí“.
“Sé que Javy y Lindor son buenos amigos y se tienen un gran respeto. Esa amistad debe usarse para bregar con ese y muchos problemas que van a pasar durante la temporada”.