Sorribes se carga a la número uno
La castellonense firma uno de los momentos de los Juegos liquidando a Ashleigh Barty, líder mundial
Cuando el revés de la desconcertada Ashleigh Barty se quedó en la red, Sara Sorribes se puso las manos en la cabeza en la pista central de Ariake, miró a su palquito y fue consciente de que había firmado una de las primeras hazañas de Tokio. La castellonense, número 48 del mundo, sacó de los Juegos a la número uno, reciente ganadora en Wimbledon. Con su tenis heterodoxo, incómodo para las rivales, de resistencia, Sorribes sacó de quicio a Barty, que fue una máquina de cometer errores no forzados y terminó desesperada y derrotada casi se diría que con comodidad: 4-6 y 3-6 en hora y 34 minutos.
Sorribes, tal vez aconsejada por Paula Badosa, que este año había ganado a la número uno sobre la tierra de Charleston, jugó bien sus cartas en el partido. Competir contra el martillo que tiene Barty en la derecha, entrar en su tenis, era firmar la derrota por la vía rápida. La australiana cayó en la tela de araña de la castellonense, que le martirizó con el revés cortado. Sin paciencia, Barty empezó a jugarse tiros que no encontraron las líneas. Un festival de mala toma de decisiones. Sorribes, además, estuvo valiente. No se descompuso cuando Barty le levantó dos bolas de set en acciones de Ojo de Halcón y terminó firmando el 4-6.
Barty no reaccionó. Siguió atrapada en sus errores. Sorribes se lo creyó y se agigantó. Con 3-3, rompió el partido de nuevo. Y tampoco le entró el miedo a ganar cuando perdió dos primeros match-balls. Sabía que era su día. Cuando a un deportista se le presenta una oportunidad así en unos Juegos, la tiene que atrapar. Sorribes lo hizo con ese 4-6 y 3-6 que quedará para siempre escrito con letras de oro en su carrera deportiva. Ella ya tiene un recuerdo inolvidable de Tokio.
La castellonense sigue también adelante en dobles, con Badosa de pareja, tras derrotar a la pareja mexicana (Olmos-Zarazua) por 6-2, 6-7 y 10-7. Carla Suárez tampoco decepcionó. Bajo un tremendo calor, derrotó con facilidad a la tunecina Ons Jabeur (6-4 y 6-1) para continuar alimentando el sueño de sus últimos Juegos. Por su parte, Garbiñe Muguruza, mejor baza española en el cuadro individual, tiró de oficio para superar un estreno incómodo ante la rusa Veronika Kudermetova (33º). La caraqueña se impuso tras 2 horas y 3 minutos por un marcador de doble 7-5.
En el cuadro masculino, los dos parejas españolas, formadas por Carreño y Davidovich, y Andújar y Carballés, dijeron adiós en dobles.
Sorpresa La española, número 48 del mundo, fue mejor en la pista Buen día Carla Suárez y Garbiñe Muguruza también vencieron