Pepe Mel “Rubén Castro, conmigo, siempre llega a 15 goles”
El técnico llegó al Málaga para tratar de reconducir un proyecto en crisis. ‘Bombero’ y escritor de varios libros.
Pepe Mel (Madrid, 59 años) llegó a un Málaga crispado social y deportivamente. Aplica bisturí para rescatar a un equipo mal diseñado con el objetivo del ascenso y que está en puestos de descenso.
—¿Había vivido a lo largo de su carrera una situación así? —Puede que sea la más complicada por todo lo que transmitía el Málaga en verano y lo que se genera en la propia ciudad. —Su apuesta por la cantera es evidente. Han debutado Moussa, Murillo y Cristian. —Será porque yo fui un futbolista frustrado en el Real Madrid. Me tiré 14 años y nunca conseguí subir. Tenía claro que, cuando fuera entrenador, conmigo los jugadores tendrían las oportunidades que se merecieran más allá de la edad. No solamente subí a 15 o 16 en el Betis, muchos de ellos nombres conocidos como Ceballos o Fabián. Fede Valverde jugó conmigo muy jovencito en el Depor; Pedri debutó con 16 años en el fútbol profesional; también Alberto Moleiro, que va a ser un magnífico futbolista, o Lucas Pérez, que se está hartando de meter goles y al que subí del Rayo B.
—Las Palmas se va a hacer de oro con Pedri.
—¡Menudo negocio! Como siga haciendo cosas, ganando partidos y jugando con la Selección, etcétera, el Barça le va a tener que dar el Camp Nou a Las Palmas… Pedri entiende el juego y se anticipa a lo que va a pasar.
—Rubén Castro empezó a golear bajo su batuta con casi 30 años.
—Fue a raíz de venir conmigo al Rayo. Le firmamos del Huesca en la 2009-10. Después, al
Betis. Conmigo siempre ha hecho como mínimo 15 goles. —Se cuida mucho...
—La alimentación es una de las reglas que lleva a rajatabla. Tiene claro que cuanto mayor es, más delgado tiene que estar. Se alimenta de pollo y piña. —¿Entiende que nunca haya sido internacional? —Seguramente sería la época que le pilló. Por la misma regla de tres que fue Aduriz a la Selección, que también se lo merecía, creo que haberle dado la oportunidad hubiera sido merecido porque ha hecho muchísimos goles en Primera.
—Ha escrito varios libros. —Escribir me ayuda a tener la cabeza clara. Un entrenador lo único que hace, que no es poco, es tomar decisiones que afectan a personas. Tienes que tener la cabeza limpia. Escribo novela histórica y novela negra.
—Ha tenido presidentes de lo más variopintos en el Rayo, Betis, Las Palmas, etc.
—Así es. Ruiz Mateos (presidió el Rayo), que en paz descanse, era una persona muy peculiar porque no entendía nada de fútbol, no sabía lo que era este mundo. Cuento una anécdota: recuerdo el primer partido de Liga que entró una hora antes de empezar porque quería conocer a los futbolistas. Como iba uno por uno preguntándoles el signo zodiacal decía: ‘¿Tu eres Aries? Pues tal, tal y tal’. Y tuvo que entrar el árbitro a decirle: ‘Señor, que tiene que empezar el partido’. Porque todavía no se había ido.
—Ha firmado hasta el 30 de junio de 2023.
—Yo no quiero ser una carga para el club. Estoy seguro de que las cosas van a salir bien y el club va a estar contento conmigo. Si eso ocurre y las cosas están bien, no habrá ningún problema para seguir.