Paliza del Barça al Madrid en un tenso Clásico
Un rodillo asedió el Alfredo Di Stéfano ayer. El Barça no dio opción al Real Madrid y volvió a conquistar el Clásico (0-4). Ya van 10 de 10. Nada pudo hacer el conjunto blanco para hacerse con la primera victoria de su historia ante su eterno rival, que prolonga su imbatibilidad en la temporada y deja claro que las azulgranas siguen sin tener oposición en la Liga F.
El espectacular inicio de campaña madridista hacía presagiar que el desenlace de este enfrentamiento sería diferente. Pero fue como los de siempre. Nada más arrancar el encuentro, una sensación de aturdimiento pareció invadir a las jugadoras de Alberto Toril, que vieron cómo Ana-Maria Crnogorcevic, de cabeza, hacía el primero.
Cuando mejor estaban las blancas, que rozaron el empate con una clara oportunidad que desaprovechó Esther, las culés volvieron a golpear, justo antes del descanso. Patri Guijarro aprovechó un balón suelto en el área e hizo el segundo.
La falta de contundencia atrás fue el principal enemigo del Real Madrid en el partido. Así llegaron los dos goles restantes en la segunda mitad, con uno de Aitana Bonmatí para sentenciar y otro en la recta final en propia puerta, también cuando el conjunto blanco había tenido oportunidad de recortar distancias con un latigazo de Zornoza que se estrelló en el palo. El Clásico se calentó en la recta final. La tensión estalló con varias acciones entre Athenea del Castillo y Rolfö y tras el pitido final, fueron Misa y Bonmatí las que protagonizaron otro desencuentro. ●