UN EQUIPO QUE SUEÑA CON TODO
El conjunto de Luis Enrique llega a Qatar con una mezcla de veteranía y juventud que puede dar buenos resultados
Cuando le preguntaron a Luis Enrique qué sentía, contestó que se había quitado «un peso de encima». Minutos antes, Álvaro Morata acababa de clasificar a España para la Copa del Mundo en Qatar, un torneo en el que la selección ha participado siempre desde la edición de 1978. Chutó Dani Olmo y el rechace lo aprovechó el delantero del Atlético de Madrid para mandar un partido gris al cajón de la historia y asegurar el duodécimo mundial consecutivo para el equipo nacional. Más que de euforia, que la hubo, la sensación era de alivio por el deber cumplido.
Y es que esos son los latidos que acompasan el corazón de esta España: la ilusión de un equipo cuajado de talento joven y un cierto fatalismo que flota alrededor del combinado nacional y del que Luis Enrique no ha sabido desprenderse con un fútbol convincente. Lejos quedan ya la gloria de 2010 y el ciclo victorioso en la Eurocopa; España ha firmado dos Mundiales decepcionantes de manera consecutiva y eso enrarece el ambiente.
Para ser justos, España es ahora un asunto completamente diferente. Sin encontrar continuidad en las sensaciones, el equipo de Luis Enrique ha sabido cosechar resultados de prestigio durante la fase de clasificación hacia Qatar pese a estar inmerso en un claro proceso de renovación. Las señas de identidad de esta selección son la intensidad y la vocación ofensiva; su lastre es la falta de contundencia en ambas áreas. Pero con todo, el seleccionador ha conseguido alinear onces que siempre compiten. El poder de España quedó en evidencia a las primeras de cambio, con las goleadas (6-0) a Croacia y a Alemania (6-0). Hay que tener en cuenta que desde la derrota contra Croacia en 2018, la selección solo ha perdido 5 partidos de 45 y en ocasiones eso no parece suficiente para los críticos más feroces. Esto habla claro de los niveles de exigencia en los que debe manejarse una selección del más alto nivel como la nuestra.
La clasificación, eso sí, ha sido un parto. Uno con un denominador común, la dificultad que encuentra el conjunto español para imponerse a defensas muy cerradas. España logró el primer puesto del grupo B sumando 19 puntos. Seis victorias, un empate y una derrota en ocho partidos sellaron su clasificación. La Roja anotó 15 goles y recibió 5. Ferran Torres, con cuatro tantos, fue el mejor goleador del equipo, secundado por Álvaro Morata, Dani Olmo, Pablo Sarabia o Carlos Soler. Y billete para Qatar.
No hubo extravagancias a última hora. La lista de Luis Enrique para el Mundial que comienza el domingo está cuajada de futbolistas en los que el técnico viene confiando sin excepción. Entre los 26 no están Sergio Ramos o Iago Aspas pero sí Marco Asensio, Ansu Fati o Nico Williams.
Con Morata como único nueve puro en la lista, España apuesta por la versatilidad de piezas como Fati, Llorente, Guillamón, Olmo o Azpilicueta. El estilo es conocido ya: posesión de balón, ambición ofensiva y espíritu competitivo. Un equipo a imagen y semejanza de Luis Enrique.