20 Minutos Madrid

Lapili «La industria me pidió cambiar mi cuerpo»

Cantante, diseñadora y bailarina, toda una artista multidisci­plinar. Lapili presenta ‘Piligrossa’, un álbum cargado de ritmo y reivindica­ción

- ALFREDO SUÁREZ cultura@20minutos.es / @alfredosca­nga

Hija de Pilar, nieta de Pilar y hermana de Ana. Mujer que disfruta mucho los escenarios e involucrar­se en proyectos que impliquen la combinació­n de diferentes disciplina­s artísticas. Una joven muy «señora» a quien le encanta juntar a mujeres para hacer arte, porque así «se crea una energía supermágic­a». Ella es María del Pilar Robles Pérez, una ciudadreal­eña más conocida como Lapili.

Cuando vea la luz, en febrero, ¿qué van a escuchar sus fans en Piligrossa? Una fusión de estilos musicales junto con mi esencia. Hay afropop, reguetón, dancehall, dembow…

¿Qué hará original a este proyecto? Aparte de ser un álbum musical es un cuento. Lleva una serie de interludio­s intercalad­os entre las canciones grabados con un formato tipo orquesta que se ubica en el foso de un teatro o de una ópera y acompaña a la obra, para que cuando se escuche el álbum desde el principio hasta el final se vea un cuento completo.

¿Cómo una chica de Ciudad Real se enamora de la música afro? De pequeña mi tío me regaló Dutty Rock, el segundo disco de Sean Paul, y gracias a él me enamoré del dancehall. También recuerdo a M.I.A, que ponían sus vídeos en la MTV alemana, y las television­es que vendían en el Eroski de al lado de mi casa sintonizab­an el canal. Entonces quería que mis padres fuesen a hacer la compra, para acompañarl­os y decirles: ‘Oye, me voy donde las teles mientras compráis, ¿vale?’. Los culpables de la Lapili son mi tío David y el Eroski (ríe).

¿Cree que está habiendo un cambio real en cuanto a la normalizac­ión de los diferentes tipos de cuerpos? No creo que lo haya de verdad. En Estados Unidos es un tema que está más normalizad­o. Ellos ya están acostumbra­dos a que exista otro tipo de gente y de cuerpos. En España siempre vamos atrasados en lo que tiene que ver con la inclusión y la música.

¿Cómo trata la industria a una mujer con cuerpo no normativo y sin pelos en la lengua? No me trata, directamen­te. Sigo siendo artista independie­nte. Cuando me han hecho una oferta, me han pedido una serie

Lapili (como se la conoce en las redes) nació en Ciudad Real en 1994. Desde pequeña sintió admiración por la música, la cultura del dancehall y los ritmos afrobeat. En abril de 2018 saltó a la fama gracias al concurso Factor X y, posteriorm­ente, se ha convertido en un símbolo de empoderami­ento femenino. de condicione­s, como cambiar mi cuerpo, limitarme en mis mensajes, la forma en la que hablo…

¿Fueron en un sentido literal esas condicione­s a nivel contractua­l? Sí, fueron imposicion­es. Te dicen: ‘¿Tú tienes este sueño? Nosotros te podemos ayudar a conseguirl­o, pero tendrías que plantearte cambiar tu cuerpo, ver si ponemos un nutricioni­sta, un entrenador personal… porque te va a ayudar.

Es que, si no, ahora y así va a ser muy difícil’.

El costumbris­mo es algo importante en su carrera, ¿qué significa para usted? Me gusta mucho ser señora. Soy muy fan de ir al ‘mercaíllo’ y de las bragas a un euro (ríe). Para mí eso es el costumbris­mo.

Colaboró con Nathy Peluso en el videoclip de La Sandunguer­a. ¿Repetiría con ella? Hice todo el estilismo de La Sandunguer­a y su gira de entonces, aprendí un montón. Encantada de haber podido formar parte de ese principio del proyecto.

¿Con qué artista le gustaría trabajar que aún no lo haya hecho?

De la escena española con las KNarias, aunque la gente que más me gusta está fuera.

¿Qué proyectos a futuro tiene pensados Lapili? Pues al final, este álbum engloba muchos proyectos. Es un cuento, tiene una puesta en escena que va más enfocada a lo teatral...

¿Cómo fue su aparición en la película Rainbow, de Paco León?

Una experienci­a superguay. Paco es una maravilla de persona y de director. Encima me dejó elegir a las chicas que iban en el coche conmigo, en mi escena, y le dije: ‘Paco, mi mejor amiga de Ghana es una artista muy top allí, aparte de icono LGTBI del país, donde está prohibido por ley pertenecer al colectivo’. Se la enseñé y dijo: ‘Nos la traemos’... Y lo hizo. ●

«En España siempre vamos atrasados en lo que tiene que ver con la inclusión y la música»

«Me gusta mucho ser señora, soy muy fan de ir al ‘mercaíllo’ y de las bragas a un euro»

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