Una avería siembra el caos en Cercanías y obliga a los viajeros a caminar por las vías
UN FALLO en la señalización deja a los pasajeros encerrados una hora en el tren en la entrada de Atocha LA INCIDENCIA obliga a cortar cinco vías y altera la circulación en la red, con retrasos toda la jornada
Lunes caótico en Cercanías Madrid. Decenas de usuarios tuvieron que terminar su trayecto hasta Atocha caminando por las vías ayer por la mañana después de pasar cerca de una hora parados en dos trenes a la altura de la calle Téllez, según denunciaron en las redes sociales con vídeos de lo sucedido. Fuentes de Renfe confirmaron que la incidencia se debió a un «fallo en la señalización a la salida de Atocha», que fue solventado.
«Tras recibir la información por megafonía, los usuarios han activado la apertura de emergencia de las puertas», informaron desde Renfe, a la que no le constaba de que el incidente hubiera ocasionado daños físicos a ningún pasajero. La circulación en la entrada de Atocha se paralizó entre las 9.00 y las 9.17 horas para garantizar la seguridad de los usuarios que caminaban por las vías. Como consecuencia, se cortaron cinco vías y se registraron retrasos medios de 15 minutos en las líneas C-2 (Guadalajara-Chamartín), C-7
Caos en las vías y retrasos
La avería produjo el caos en las vías de Atocha y retrasos en los trayectos de Cer- canías. Muchos usuarios denunciaron demoras de hasta dos horas respecto a la llegada prevista a su destino, porque la incidencia trastocó a varias líneas.
(Alcalá de Henares-Príncipe Pío) y C-8 (Guadalajara-Cercedilla). Las demoras continuaron durante la tarde.
Tal y como se aprecia en las imágenes subidas a X por los
afectados, multitud de viajeros decidieron bajar del tren para terminar el trayecto a pie por las propias vías de ferrocarril. Renfe, que está investigando las circunstancias de lo
Vagones llenos
El suceso ocurrió por la mañana, con los trenes llenos. Varios usuarios contaron que no había aire acondicionado y el calor era «agobiante»
Evacuación de los pasajeros
El personal de la estación de Atocha fue avisado inmediatamente y ayudó a los pasajeros en la evacuación y a subir a los andenes
sucedido, relató que uno o varios pasajeros de ambos trenes afectados accionó el sistema de alarma y el resto de viajeros abandonaron el convoy para llegar caminando por las vías
de la red de Cercanías hasta la estación. Juan Francisco, trabajador de 21 años y residente en Vallecas, fue uno de ellos. «Es una vergüenza. Esto es un día más en Renfe, lo habitual», lamenta a 20minutos. «El vagón iba lleno. La gente estaba nerviosa y agobiada. Una niña casi se desmaya por el calor y otra persona ha sufrido vómitos», explica.
Por su parte, Marta Carrasco, usuaria de la C7, denunció: «Todos íbamos sudando, ha sido muy agobiante, dos personas se han desmayado. No decían nada por megafonía y, al cabo de 50 minutos, la gente ha comenzado a golpear las puertas». Carrasco, que se quedó dentro del convoy, cogió el tren a las 7.15 horas para llegar a su clase a las 9.00 horas. Sin embargo, no llegó a Pozuelo, donde da clase, hasta las 11.00 horas. Desde Renfe aseguraron a este periódico que estos incidentes no han ocasionado daños físicos a 20M.ES/MADRID
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ningún usuario y que tampoco tienen información sobre los desmayos de varios pasajeros que relatan los testigos consultados.
Los trenes fueron «recuperando gradualmente sus frecuencias de paso habituales», según Adif, aunque varios usuarios se quejaron de convoyes parados y retrasos durante la tarde. Estas demoras fueron consecuencia de la incidencia de la mañana, explicó Renfe, que alertó del peligro para la seguridad de los pasajeros que supone el caminar por las vías de la estación.
Por otro lado, otra avería en la señalización afectó durante una media hora a la línea de alta velocidad que une MadridChamartín y Valladolid, que registraron retrasos medios de 20 minutos. ●