El calor da un respiro pero la Feria afronta su día más tórrido
La llegada de vientos del suroeste aliviará hoy la sensación de calor, aunque se espera que el mercurio llegue a los 38 ºC
La Feria pasa su ecuador con un leve alivio en el termómetro o, al menos, en la sensación de calor. Se espera para hoy que la temperatura alcance los 38 grados. Si se cumple el pronóstico, Sevilla batirá el récord del día de más calor en un mes de abril según el histórico. Ayer, con una temperatura de 36,4 grados, ya se vivió la jornada más calurosa en este mismo mes en la capital hispalense, superando así los 35,4 grados registrados en 1997, según informan desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). De esta forma, este récord podría volver a batirse mañana.
Sin embargo, a pesar que el mercurio rozará los 40 grados, la Aemet había desactivado ayer al cierre de esta edición (23.30 h) la alerta amarilla anunciada para hoy en Sevilla debido a la previsión de un viento del suroeste, «propio del Valle del Guadalquivir, que suele llegar por las tardes». Aunque, añadieron, «no se descarta volver a activarla» en función de la hora a la que llegue ese viento. No queda más que arriegarse y disfrutar la recta final de la Feria. Para ello, consejo del buen feriante, no hay que olvidar los objetos básicos: botella de agua y abanico.
Si tiene suerte y llega a pie, le regalarán alguno de propaganda en las vías que dan acceso al recinto ferial. De no ser así, siempre puede encontrar puntos de avituallamiento de agua dentro
del Real, en las calles Gitanillo de Triana y Pascual Márquez y en la Caseta de los Niños Perdidos, informó el Ayuntamiento, tras realizar un balance del CECOP de la jornada de ayer. Un día en el que continuó el paseíllo de políticos como viene
siendo habitual estos días. El PSOE protagonizó las estampas con la recepción en la Caseta Municipal, a la que acudieron la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez; la ministra de Justicia, Pilar Llop; y la ministra
de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, que estuvieron acompañadas por el presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, y el alcalde de la ciudad, Antonio Muñoz, que ejerció de anfitrión.