Los síntomas que indican apnea del sueño
Este trastorno disminuye ostensiblemente la calidad de vida de quien lo padece y puede derivar en infartos o ictus
Unas de las patologías más frecuentes y susceptibles de ser tratadas mediante terapias respiratorias son la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y la apnea obstructiva del sueño (AOS). Esta última afección se caracteriza por la somnolencia diurna y la presencia de ronquidos durante el sueño. Se estima que en la edad adulta la padecen el 4% de la población masculina y el 2% de la femenina.
La apnea del sueño merma la cantidad de aire que utilizamos en cada movimiento respiratorio durante el sueño «debido a la reducción en el calibre de la vía aérea, lo que desencadena consecuencias en el funcionamiento de pulmones, cerebro, arterias y corazón», detalla el jefe de Neumología del hospital Quirónsalud Valencia, José Vicente Greses. Hasta un 50% de las personas que roncan pueden sufrir el síndrome de la apnea del sueño. Asimismo, las que contraen AOS tienen más posibilidades de adolecer deterioro cardiovascular, lo que incrementa el peligro de infarto o de ictus.
Aunque puede afectar a cualquiera, «los grupos más susceptibles de padecer apnea del sueño son las personas con sobrepeso, los hombres fumadores y las mujeres después de la menopausia», indica el experto. Para prevenirla es necesario adoptar medidas de higiene del sueño como «controlar el peso, no fumar, no acostarse hasta que hayan pasado varias horas de la última ingesta del día, dormir de lado y tener cuidado con los efectos secundarios de algunos fármacos».
La calidad de vida de los pacientes que se someten a este tipo de terapias respiratorias mejora de forma «completa y absoluta» en la mayoría de los casos, asegurando «la desaparición de todos los riesgos para la salud futura que la apnea supone y la normalización de la respiración durante el sueño», señala el doctor. Los tratamientos se adaptan hasta encontrar el más adecuado y se ajustan hasta conseguir el objetivo terapéutico, que es la resolución del problema respiratorio nocturno.
TRATAMIENTOS EFECTIVOS
La primera medida terapéutica aplicada a estos pacientes es el abandono del hábito tabáquico, puesto que, junto al alcohol y los malos hábitos de sueño, es uno de los motivos de la aparición de la apnea de sueño. Además, este especialista advierte de que «algunos fármacos que actúan sobre el estímulo respiratorio, como los sedantes», también aumentan la probabilidad de padecer esta afección.
«Algunos pacientes se pueden beneficiar de un tratamiento mecánico que mantenga la vía aérea permeable durante el sueño, como los dispositivos de adelantamiento mandibular (DAM). Otros pueden ser candidatos a diversas cirugías que consigan mejorar el espacio faríngeo durante el sueño o incluso modernos dispositivos de neuroestimulación sobre los músculos que abren la vía aérea para que se facilite la respiración nocturna», explica Greses.
Precisamente, Quirónsalud Valencia acaba de poner en marcha un nuevo servicio de terapias respiratorias con el objetivo de ofrecer un seguimiento integral y personalizado a todos los pacientes que presentan este tipo de patologías.