Muchas ocasiones, buena imagen y ningún gol

Dinamarca y Túnez empataron ayer en el Education City Stadium de Rayán en un duelo vibrante pero sin acierto que les mantiene a ambos con las opciones intactas de clasificación para los octavos de final tras su estreno en Qatar.

Hubo reparto de puntos y también buenas sensaciones para ambas selecciones, a falta de ese acierto que se vaticina clave para unos y otros. Los escandinavos tuvieron la ocasión más clara, con un remate de cabeza, algo forzado, de Cornelius que dio en el palo a falta de 20 minutos.

Túnez resistió contra viento y marea a la ofensiva vikinga.

Con un central, Yassine Meriah, imperial, liderando a la zaga de las Águilas de Cartago, los africanos mostraron en todo momento coraje para achicar agua. Pero no solo eso, llegaron a tener el control del juego durante varias fases, sobre todo en la primera parte, y ocasiones para marcar.

Excepto goles, el duelo tuvo de todo. De hecho, sí hubo goles –uno por cada bando–, pero fueron bien anulados por sendos fueras de juego. La iniciativa ofensiva del partido fue basculando de un lado a otro, y ambos equipos pusieron a prueba a los porteros Kasper Schmeichel y Aymen Dahmen, que tuvieron un buen partido.

De hecho, Schmeichel protagonizó una gran parada, clave, ante el intento de vaselina de Issam Jebali en una contra tunecina. Pero Dahmen no se quedó corto y anuló y secó todos los intentos de los daneses, como dos buenos tiros lejanos de Hojbjerg y Christian Eriksen.

A medida que los jugadores de Túnez perdían energía y fuerza, Dinamarca apretó, pero el marcador ya no se movió. ●