La Razón (Madrid) - A Tu Salud
«Es la única vacuna en fase 3 con la forma crítica del SARS-CoV-2»
«Tenemos un vector cuya seguridad está demostrada ya en más de 100.000 personas y es el mismo que se usa en nuestra vacuna del ébola, que ya ha sido aprobada»
Conseguir una vacuna contra el SARS-CoV-2 que nos permita retomar nuestras vidas tal y como eran antes de la aparición de este virus. Ese es uno de los grandes retos –pero ni mucho menos el único– a los que se está sometiendo la Ciencia en este 2020, el año del coronavirus. Pero parece que esos esfuerzos podrían dar sus frutos mucho antes de lo esperado y este invierno podríamos disponer de una inmunización frente a la Covid-19.
Eso es al menos lo que están intentando conseguir desde Janssen, que está trabajando en una de las 240 vacunas candidatas que hay en estos momentos en investigación, tal y como apuntó Martín Selles, presidente y consejero delegado de Janssen España, en el momento de recoger el premio, «30 en fases clínicas y ocho en fases avanzadas, 2 o 3».
Sellés también señaló que, para lograrlo cuanto antes «los laboratorios estamos trabajando a riesgo. Y es que la producción a gran escala es el otro gran reto al que nos enfrentamos, producir miles de millones de dosis para llegar a todo el mundo», aseguró.
España ha sido uno de los tres países en los que se ensaya con la vacuna desarrollada por Janssen (Johnson & Johnson), que se está llevando a cabo en los hospitales madrileños de La Paz y La Princesa, y el Marqués de Valdecilla de Santander. «España ha sido elegido para este ensayo en fase 2 por tres razones: porque Janssen cuenta aquí con uno de los grupos de investigación clínica –dirigido por el doctor Miguel Zaballos– que es de los más relevantes dentro de la compañía, porque hay centros sanitarios e investigadores clínicos con gran experiencia en el desarrollo de fases tempranas y porque la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps) cuenta con excelentes profesionales con los que tenemos muy buena comunicación y colaboración», explica Antonio Fernández, director de Acceso al Mercado y Relaciones Gubernamentales de Janssen España.
La vacuna de Janssen tiene algunos aspectos que son únicos. En primer lugar, utiliza un vector viral –al igual que se hace en terapia génica–. «Esto hace que sea muy diferente del resto de las que podríamos llamar “convencionales”. De hecho, tuvimos que desarrollar este nuevo tipo de vacunas para virus como el ébola, el VIH o el VRS porque ahí es donde las convencionales no funcionan y han fracasado estrepitosamente. El vector de nuestra candidata, que utiliza nuestra tecnología AdVac, también es único y tiene importantes ventajas frente a los de otras vacunas que utilizan vectores con los que apenas se tiene experiencia o son totalmente nuevos en la clínica y que por tanto nunca ha recibido aprobación regulatoria previa. En nuestro caso tenemos un vector cuya seguridad está demostrada ya en más de 100.000 personas y es el mismo que se usa en nuestra vacuna del ébola que ya ha sido aprobada. Otra característica es que nuestro vector es un adenovirus humano, a diferencia, por ejemplo, de otras vacunas que usan uno de chimpancé», continúa Fernández.
Otra prueba de la confianza que se puede tener en su plataforma es que su inmunización frente al ébola, que utiliza exactamente el mismo vector que la de la Covid-19, se puede emplear a partir de los 12 meses de edad.
Otros aspectos que la distinguen de otras vacunas es la posibilidad de utilizar una sola administración, lo que es muy importante en el caso de una emergencia pandémica como la que estamos viviendo, y que se pueda distribuir de forma muy conveniente porque no requiere congelación, esto último va a ser una seria limitación de otras vacunas que hay en desarrollo y que requieren congelación a temperaturas extremas.
«Por último, me gustaría destacar, ahora que ya hemos comenzado con los ensayos de fase 3 y que los protocolos de los ensayos de las diferentes vacunas están ya en el dominio público, algo que es importantísimo y es que nuestros criterios de eficacia son los más estrictos. En opinión de los expertos que han evaluado y comparado los protocolos, somos la única vacuna en fase 3 que incluye las formas “graves y críticas” de la Covid-19 como parte de la evaluación primaria de la eficacia. Esto, junto con una metodología de estudio muy estricta, nos asegura que en caso de ser eficaces, esta eficacia será clínicamente muy relevante. Es importante destacar que tenemos varios candidatos a vacuna en ensayos de fase 3 pero que son muy diferentes entre sí y probablemente no vayan a ser comparables en absoluto», concluye Antonio Fernández.