La Razón (Madrid) - A Tu Salud
El arsenal «made in Spain» anti Covid-19
España cobra protagonismo en la lucha contra el SARSCoV-2 con la producción nacional de jeringas y vacunas
Hay quienes han considerado esta pandemia del coronavirus como la Tercera Guerra Mundial. Y no es de extrañar, ya sea por el número de muertos que ha causado hasta el momento o por el impacto que ha tenido en nuestro estilo de vida. La diferencia con las otras dos anteriores es que, en esta ocasión, el enemigo es común a toda la Humanidad: el SARS-CoV-2, un virus desconocido hasta hace menos de un año y que ha trastocado completamente nuestro mundo.
Con las navidades casi encima –y deseando que el reloj de la Puerta del Sol dé las 12:00 el día 31 poniendo fin a este año aciago– y la vacuna a la vuelta de la esquina, es momento de hacer recuento y ver la aportación española a esta guerra sin cuartel contra la Covid-19. Porque aunque, como decíamos, ésta es una guerra a nivel mundial, la contribución de cada uno de los países ha sido fundamental: investigaciones compartidas a nivel global casi en tiempo real, ensayos multicéntricos en todo el planeta para probar los fármacos que pudieran frenar el virus o colaboraciones internacionales en las que cada estado aportaba lo mejor de su parte en esta lucha.
Aunque muchos de los proyectos iniciados en nuestro país aún están en desarrollo, parece que las perspectivas son prometedoras. Para hacernos una idea del esfuerzo, tan sólo el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha movilizado a más de 300 grupos de investigación que trabajan en áreas muy diferentes, desde virólogos, epidemiólogos hasta expertos en química, en computación o en medio ambiente con proyectos dirigidos a desarrollar desde kits de diagnóstico y prueba de antivirales, análisis genómicos y correlaciones clínicas, seguimientos de movilidad, de presencia del virus en hospitales o en aguas residuales o el estudio sobre los factores genéticos en relación a la gravedad de la enfermedad.