La Razón (Madrid) - A Tu Salud
ATENCIÓN PRIMARIA: AHORA O NUNCA
HaHa llegado el momento definitivo para que la reforma que requiere la Atención Primaria (AP) en el Sistema Nacional de Salud (SNS) desde hace décadas sea llevada a la práctica.
Como decía Elvis Presley en una de sus mejores canciones, «it’s now or never» y es así tanto por la crisis asistencial que ha causado la Covid-19, como por la oportunidad que representan los fondos para la reconstrucción frente a la propia pandemia procedentes de la UE.
Aumento del reconocimiento social y mejoras formativas, laborales y retributivas a los sanitarios para atraer y fidelizar talento incluso antes de la etapa MIR; incremento y actualización del equipamiento tecnológico y digital disponible; pleno desarrollo de la coordinación asistencial con atención hospitalaria y servicios sociales, son reformas y avances que no pueden esperar más tanto por las insuficiencias acumuladas en los últimos años, como por las carencias que ha generado el virus SARS-CoV-2.
La gestión de los más de mil millones de euros para Primaria que contemplan los Presupuestos Generales del Estado de 2021 debe orientarse a posibilitar que el primer nivel asistencial vea impulsada su capacidad resolutiva al máximo y supere definitivamente el concepto tradicional de «puerta de entrada» al SNS. Esos mil millones deben servir para que las recomendaciones contempladas en el «Marco Estratégico para la mejora de la Atención Primaria en España» que Sanidad impulsó en 2006 y rescató en 2019 –sin avance práctico alguno en ambos casos– sean aplicadas de una vez por todas y den respuesta a las demandas históricas de las sociedades científicas, los colegios profesionales, los sindicatos...
La sociedad española del siglo XXI necesita un SNS del siglo XXI, y eso pasa por una AP más y mejor dimensionada. Este avance debe producirse ya y no sólo por la Covid-19 y las crisis de Salud Pública por venir, sino también por el envejecimiento, la cronicidad, la pluripatología, la sostenibilidad… es una urgencia ante la cual, y como también cantaba Elvis, «tomorrow will be too late».