La Razón (Madrid) - A Tu Salud

Las orexinas hacen soñar con la cura del insomnio

► Esta nueva familia de medicament­os abre la puerta a solucionar de forma eficaz los problemas para dormir

- Eva S. Corada. MADRID

LaLa reciente ola de calor que asoló la Península la semana pasada o el estrés causado por la pandemia son dos ejemplos recientes de cosas que pueden hacernos perder el sueño. En el primer caso, las noches tropi-cales tropi-cales con temperatur­as de más de

España es el país del mundo en el que más benzodiace­pinas se toman

20ºC en muchas localidade­s hicieron hicieron difícil conciliarl­o; en el segundo, el aumento de ansiedad provocada por la Covid-19 debido a la incertidum­bre, incertidum­bre, tanto médica como de la situación en general, fue la causa. De hecho, «la pandemia ha dado lugar a un aumento de un 30% de los casos de insomnio, sobre todo aquel que se refiere a la dificultad para empezar a dormir, es decir, de inicio», apunta Eduard Estivill, neurofisió­logo neurofisió­logo y especialis­ta en Medicina del Sueño.

El insomnio es un problema muy extendido y complejo pero, pese a ello, hay pocas alternativ­as para combatirlo desde el punto de vista farmacológ­ico. Sin embargo, los buenos resultados logrados con una nueva familia de medicament­os ha causado una revolución en su abordaje. abordaje. Porque, si a día de hoy el uso de hipnóticos es el principal tratamient­o, tratamient­o, sus resultados no son del todo satisfacto­rios.

« Han pasado muchos años en los que no han salido nuevas moléculas. moléculas. Todavía estamos arrastrand­o arrastrand­o los fármacos en los que nosotros mismos participam­os en los ensayos ensayos clínicos, como el zolpidem, o algún otro de vida media muy corta. corta. Se siguen empleando, pues, estos estos medicament­os, del grupo de las benzodiace­pinas, usados correctame­nte correctame­nte y controlado­s por el médico pueden ser adecuados, pero como automedica­ción pueden provocar adicción. La parte novedosa es este fármaco nuevo que viene de otro grupo de sustancias, las orexinas. Es una sustancia que se ha descubiert­o descubiert­o en una enfermedad muy concreta, la narcolepsi­a, (que son ataques de sueño), y se ha visto que las personas que la sufren tienen estas orexinas alteradas. Entonces, lo que se ha hecho es buscar un medicament­o que tuviera esta acción, acción, es decir, de dar sueño», explica explica Estivill.

A esta familia pertenecen dos de los medicament­os en los que más esperanzas hay puestas: daridorexa­nt, daridorexa­nt, recienteme­nte aprobado por la Agencia Europea del Medicament­o, Medicament­o, y suvorexant, del que se han dado a conocer los prometedor­es resultados de un estudio esta misma semana.

Del primero, cuenta Diego García-Borreguero, García-Borreguero, especialis­ta en Neurología y Psiquiatrí­a, director médico internacio­nal del Instituto de Investigac­iones del Sueño y uno de los investigad­ores españoles del programa de ensayos con esa molécula, molécula, que «marca un antes y un después en el tratamient­o del insomnio insomnio crónico por varios motivos. En primer lugar, porque es el primer tratamient­o que se aprueba en Europa Europa y que está desarrolla­do específica­mente específica­mente para tratarlo, una enfermedad enfermedad que, hasta ahora, carecía de un tratamient­o adecuado. En segundo segundo lugar, además de mejorar los parámetros del sueño, mantiene intacta la capacidad funcional de la persona al día siguiente, reduciendo el impacto que tiene el insomnio sobre la calidad de vida. Por último, cuenta con un mecanismo de acción acción radicalmen­te nuevo que ha probado no generar dependenci­a ni tolerancia en los ensayos clínicos, en los que se administró administró el fármaco durante 12 meses, por lo que permite ajustar la temporalid­ad temporalid­ad del tratamient­o tratamient­o de forma más adecuada y segura para el paciente. paciente. Este aspecto aspecto es verdaderam verdaderam en t e revolucion­ario, ya que los fármacos con los que contamos contamos en la actualidad actualidad fueron desarrolla­dos desarrolla­dos para tratamient­os de no más de cuatro semanas debido a su perfil de seguridad, seguridad, lo que no permitía tratar adecuadame­nte adecuadame­nte los casos de insomnio crónico».

Precisamen­te el segundo, suvorexant, suvorexant, se ha visto que mejora el sueño y, además, alivia los síntomas de abstinenci­a de opioides en pacientes pacientes en recuperaci­ón. «Los resultados resultados de los estudios realizados con este fármaco, con un mecanismo similar al daridorexa­nt, son prometedor­es prometedor­es y por ello están siendo evaluadas evaluadas en poblacione­s especialme­nte especialme­nte vulnerable­s al insomnio y al efecto del abuso de sustancias, como en estos pacientes en recuperaci­ón. recuperaci­ón. No obstante, es fundamenta­l ir a la base del problema e intentar paliar los efectos del insomnio a nivel nivel poblaciona­l», señala Ana Fernández Fernández Arcos, neuróloga coordinado­ra coordinado­ra del Grupo de Estudio del Sueño de la Sociedad Española de Neurología.

En concreto, los investigad­ores del estudio, publicado en la revista «Science Translatio­nal Translatio­nal Medicine», administra­ron dosis de 20 mg o 40 mg del medicament­o medicament­o a 38 participan­tes participan­tes con trastorno trastorno por uso de opioides, que también estaban en una disminució­n disminució­n gradual con buprenorfi­na y naloxona. Usando electroenc­efalografí­a electroenc­efalografí­a inalámbric­a y una escala de síntomas de abstinenci­a, abstinenci­a, encontraro­n que quienes recibieron suvorexant durmieron más durante el período de disminució­n disminució­n gradual de siete días y tuvieron tuvieron síntomas de abstinenci­a menos graves después de la disminució­n disminució­n gradual.

Lo primero que hay que entender del insomnio es que es un síntoma, lo que significa que es algo que nos pasa, pero siempre hay una causa que lo provoca. Y hay más de 40, algunas muy conocidas, como el aumento del consumo de estimulant­es estimulant­es tipo café, colas o drogas. También También enfermedad­es, como el dolor, problemas de tiroides, psiquiátri­cos, psiquiátri­cos, alzheimer... Pero la causa más importante que afecta a la mayoría de personas no es realmente una enfermedad, sino el estilo de vida. «Sabemos que todo lo que sucede durante el día nos afecta en el momento momento de dormir, porque hay que desconecta­r de los estímulos que tenemos y esto es imposible porque no hay un interrupto­r, y que hemos de entender que este tipo de insomnio insomnio solo se resuelve con unas buenas rutinas que consisten básicament­e en preparar el sueño dos horas antes de ir a la cama», explica Estivill.

Por eso la medicación se emplearía emplearía solo «en casos concretos, principalm­ente principalm­ente en insomnio de inicio agudo relacionad­o con alguna situación situación vital estresante que puede ir asociado de ansiedad importante. Debe limitarse a pocas semanas, hacerse seguimient­o clínico y acompañars­e de otras medidas para evitar que se cronifique el problema», problema», apunta Fernández Arcos. Es más, «el tratamient­o con benzodiace­pinas, benzodiace­pinas, o con otras medicacion­es medicacion­es como zolpidem, pueden ayudar inicialmen­te, pero más adelante se produce tolerancia, persistien­do el problema. Por ello no deben ser medicacion­es medicacion­es crónicas», continúa.

Consumo récord

Y es que, según el último informe de la Junta Internacio­nal de Fiscalizac­ión Fiscalizac­ión de Estupefaci­entes (JIFE), elaborado elaborado con datos prepandemi­a, España es el país del mundo en el que más medicament­os para dormir dormir se consumen. Entre ellos, destacan destacan las benzodiace­pinas, en concreto concreto alprazolam, diazepam, lorazepam, oxazepam, clonazepam, clonazepam, bromazepam, lormetazep­am y brotizolam. También subió el consumo consumo de los fármacos psicotrópi­cos que se utilizan para tratar casos leves de ansiedad, insomnio y trastornos emocionale­s, con más de 50 dosis por cada 100 mil habitantes.

«Los fármacos no son buenos o malos, sino que están bien o mal empleados. Si yo tengo una causa que provoca insomnio que se puede curar con medicación –por ejemplo, por una depresión– serán útiles. En cambio, si lo estoy tomando para solventar este acúmulo de tensión durante el día no sirve de nada porque porque el hipnótico simplement­e te hará dormir normalment­e con peor calidad y no solventará el del problema problema que es la forma de vida que tenemos», explica Estivill, que también también es director de las clínicas del Sueño Estivill. «Y, lo más importante, importante, es que no tenemos que hacer automedica­ción. Esto sucede mucho mucho en los casos de insomnio, la gente, como lo pasa muy mal, tiene gran tendencia a probar lo que le da a la abuela o un amigo», lamenta.

La pandemia ha provocado un aumento del 30% en los problemas para dormir

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