La Razón (Madrid) - A Tu Salud
La innovación que lidera los trasplantes a nivel mundial
► Organoides, xenotrasplantes o quimeras marcan el futuro de la donación de órganos
España es un referente mundial en donación y trasplante de órganos y se ha consolidado como el ejemplo a seguir. Los datos así lo certifican, pues alcanzó en 2023 un total de 5.861 trasplantes de órganos, lo que supone una tasa de 122,1 trasplantes por millón de población, es decir, un 9% más que el año previo y un crecimiento del 7% en donación en comparación con 2022.
«Con estos datos parece difícil seguir mejorando las cifras, pero lo cierto es que la tendencia de 2024 ya apunta a que será posible superar este récord. Aunque todavía es pronto para poner una cifra, España aspira a superar los 6.000 trasplantes este año, porque las donaciones de fallecido han experimentado en nuestro país un crecimiento de un 13% en los meses de enero y febrero en comparación con los mismos del año anterior», aseguró Beatriz Domínguez- Gil, directora de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) durante la XIX Reunión Nacional de Coordinadores de Trasplantes y profesionales de la comunicación, celebrada esta semana en Toledo.
Partiendo de los extraordinarios datos obtenidos en 2023, la ONT se enfrenta al reto de la innovación constante: «Estamos de enhorabuena en toda la red de trasplante, pero al llegar a este punto es obligado plantearnos, ¿y ahora qué?», reconoció Domínguez-Gil, quien apuntó a que la respuesta pasa por la innovación.
El futuro «pasa por mejorar procedimientos como el empleo de xenotrasplantes, una práctica cada vez más próxima en la clínica, pero en la que todavía queda mucho por recorrer; también por las quimeras, es decir, el uso de grandes animales como incubadoras de órganos humanos. Esto no está exento de polémica y quizá pueda ser una realidad en unos cuantos años; y pasa por el empleo de los organoides, es decir, mini órganos que se generan a partir de células pluripotenciales y que podrían tener aplicación para evitar o retrasar la necesidad de un trasplante si regeneran un órgano dañado, o podrían incluso regenerar riñones u órganos que no son válidos para trasplante y que podrían tratarse fuera del cuerpo», avanzó Domínguez-Gil.
El reto de lograr más donantes
A pesar de que España es líder mundial en el trasplante de órganos, lo cierto es que «a día de hoy todavía estamos lejos del balance positivo entre la necesidad y la oferta. Cada día tenemos cerca de 5.000 pacientes en lista de espera para ser trasplantados», detalló la directora de la ONT, quien apuntó el camino hacia dónde debemos ir: «Hemos de llevar la donación a todo el hospital. El coordinador de trasplantes ya no es un receptor de notificaciones, sino que debe ser un identificador activo de donantes. Hemos confirmado que se puede aumentar aumentar el número de trasplantes con cuidados intensivos orientados a la donación. Pero el gran revulsivo ha sido la donación en asistolia, de modo que la mitad (hasta el 45% de los donantes) ya se realiza así, es decir, con órganos que proceden de una persona a la que se le diagnostica la muerte tras el cese irreversible de las funciones cardio respiratorias», detalló.
En este contexto, la ventana de crecimiento que tiene la donación en asistolia ha llegado a nuestro país de la mano de la Ley de Eutanasia, «algo que ha tenido una aceptación abrumadora en nuestro campo, hasta el punto de que ya en todas las autonomías se han registrado casos de donación de pacientes tras solicitar una ayuda para morir, por lo que el objetivo es que se normalice en nuestro país», reconoció la directora de la ONT.
Además de aumentar el número de donaciones, la ONT reconoce que otros grandes desafíos pasan por alcanzar la cifra de cero pérdidas de órganos evitables, algo cada vez más real gracias a la generalización del empleo de la tecnología ECMO. A esto se añade la necesidad de lograr el acceso al paciente con dificultades para trasplantarse, como los hiperinmunizados, además de aprovechar los órganos de donantes de riesgo no estándar, es decir, con patologías que podrían ser trasmisibles al receptor, donde ya se dan los primeros pasos.