ERC se cansa de JpC y les advierte: «Estamos perplejos, así no se puede trabajar»
Torrent frena tramitar el cambio de ley para que Puigdemont sea investido a distancia
Desde el martes 30 de enero, cada día que pasa, el acuerdo de investidura y gobierno entre Junts per Catalunya (JpC) y ERC está más lejos. El Parlamento de Cataluña vivió ayer una nueva jornada de reproches entre los portavoces de las dos formaciones políticas, en esta ocasión, otra vez, por decisiones adoptadas por el presidente parlamentario, Roger Torrent (ERC). Ahora mismo, solo la falta de una fecha límite para la investidura del próximo presidente de la Generalitat juega a favor de JpC y ERC. Una situación excepcional que también ha dejado anestesiados a los grupos de la oposición.
En el orden del día de la reunión ordinaria de la Mesa de ayer no se incluía la petición de JpC para modificar la Ley de la presidencia de la Generalitat y del Govern –propuesta registrada el viernes–, por lo que los miembros de esta formación en el máximo órgano de gobierno del Parlament pidieron explicaciones a Torrent. Tal y como informaron a ABC fuentes parlamentarias, la respuesta de Torrent fue técnica debido a que JpC había hecho la propuesta de cambio legislativo mediante dos escritos y, por lo tanto, por dos vías distintas. Una situación que se dio a conocer a la prensa tras la reunión de la Mesa y de la que JpC no informó el viernes.
Así, Torrent, en base a la opinión de los letrados parlamentarios, pidió a JpC que aclare si pretende cambiar la ley para investir a Puigdemont por el procedimiento de «lectura única» –es decir, con la vista puesta en los sucesos del 6 y el 7 de septiembre pasados– o por el trámite de «urgencia», que acorta los plazos legales, pero sigue otro procedimiento.
Turull y Rull no firman
En cualquier caso, para el trámite de «urgencia» JpC registró la propuesta con la firma de 27 de sus 34 diputados, sin que entre estos figuren Jordi Turull, Josep Rull, Lluís Guinó y Marc Solsona. Los tres primeros están investigados por el Tribunal Supremo y el cuarto, alcalde de Mollerusa (Lérida), suena como una de las posibles alternativas a una investidura fallida de Carles Puigdemont. Un hecho, la ausencia de estas firmas, que desde ERC se encargaron de recalcar. Aunque Eduard Pujol, portavoz adjunto de JpC, y Gemma Geis le quitaron importancia.
Tras la reunión de la Mesa, JpC decidió pasar al ataque contra Torrent, una vez más, después de que este aplazara la investidura de Puigdemont el 30 de enero. «Tenemos muy claro que no nos moveremos del compromiso adquirido (...) para encontrar fórmulas que nos permitan la investidura de Puigdemont», dijo Pujol en rueda de prensa, quien añadió: «Nos da una pereza enorme tener que caer en la telaraña
Eduard Pujol ( JpC): «No nos moveremos del compromiso adquirido con Puigdemont»
de legalidad. Lo que nos gustaría es ir a una velocidad de crucero».
ERC no podía dejar así las cosas y Sergi Sabrià, portavoz de la formación, respondió a JpC y les acusó de «filtrar» informaciones incorrectas y promover «rumores»: «Estamos perplejos, así no se puede trabajar».
Recurso ante el TEDH
Además, la segunda medida que adoptó ayer el presidente parlamentario fue la de promover un recurso –por la vía de medidas cautelarísimas– ante el Tribunal Europeo de los Derechos Humanos (TEDH) para defender la propuesta de investidura de Puigdemont y contra las medidas cautelares establecidas por el Tribunal Constitucional. Torrent daba así respuesta a la petición de amparo que Puigdemont le pidió por carta horas antes del 30 de enero. Pero tampoco gustó a JpC.
Pujol definió esta decisión como «unilateral» y «arbitraria» y reclamó a Torrent que aplique las «garantías» y las «estrategias» que «no hacen falta ir a buscarlas a Estrasburgo», en referencia a la sede del TEDH.
Sabrià aseguró, por su parte, que Torrent, antes de anunciar el recurso ante el TEDH, lo comunicó a Josep Costa, vicepresidente del Parlament y diputado de JpC, «sin oposición de este».