Libertad para informar
Las revelaciones publicadas en los últimos días sobre la tesis doctoral de Pedro Sánchez y la defensa de la libertad de información y opinión que, frente a las presiones ejercidas por La Moncloa, realiza ABC han tenido cumplida respuesta por parte de nuestros lectores. MIGUEL DE ENTREMARES califica de «pluscuamperfecto» el editorial de ayer, que llevaba por título «Las excusas de Sánchez no se sostienen». «Un sobresaliente inmerecido –sigue su carta– se le puede otorgar a cualquiera. He leído dos veces el citado editorial. Claro, preciso, contundente. Su lectura, por ejemplarizante, debiera ser obligada en todas las facultades de Periodismo. Plantar cara al poder es casi siempre muy duro, pero siempre peligroso. Que Dios les dé suerte y les proteja. Defender la verdad, hoy, es casi un suicidio».
«Me complace muchísimo ver a mi periódico donde solía. Y no me duelen prendas, sino al contrario, para felicitar al director por mantener el puesto de ABC al servicio de la verdad y, por tanto, del bien», escribe el catedrático emérito de Derecho Mercantil de la UCM JOSÉ MARÍA DE LA CUESTA.
«Felicidades por la exclusiva de ABC sobre el plagio cometido por Pedro Sanchez con su tesis doctoral», comenta FERNANDO
SABIDO. «Excelentes y valientes los editoriales del jueves 13 y el viernes 14 de septiembre sobre este asunto. ABC está dando una lección de periodismo, independencia, resistencia ante las presiones del poder y servicio a sus lectores y a España. Me siento orgulloso de ser lector y suscriptor de ABC».
«¿Por qué no sacan –nos inquiere RICARDO SUÁREZ
GIL– un suplemento lo suficientemente amplio y explícito con toda la investigación realizada por Javier Chicote, desmontando la falsedad del desconocido test de plagio que aducen para apagar el incendio en el que se hallan metidos los socialistas? Un saludo y enhorabuena por seguir honrando sus ciento quince años de historia».
«Mi enhorabuena a ABC por informarnos sobradamente y con objetividad sobre la llamada tesis del señor Sánchez. Que el ejemplo cunda a otros medios. Gracias por tenernos informados en un asunto tan importante, porque ya no se trata solo de la tesis de Sánchez, sino de las tesis en general y de la Universidad española. ABC somos todos los que queremos conocer la verdad de la tesis del señor Sánchez, de sus plagios, de sus ayudas y favores. Pensemos en el número de tesis hechas en España y las que se están elaborando. Por eso es tan importante conocer la verdad. No puede haber currantes verdareros durante años y aprovechados ocasionales para la ostentación de un título y calificacion no merecida. Repito, ABC somos todos», escribe DIEGO RUIZ.
«Desde Montevideo –escribe MARCOS CISNEROS DE XIMÉNEZ Y RESPHIGI– nos sumamos a la rectitud y al profesionalismo de ABC, diario que leyeron mis abuelos, mis padres y la familia mía presente. No ceder, no dejarse intimidar, ni cualquier marcha atrás».
«Creo totalmente en el
periódico ABC, una institución en España que ya mis abuelos leían. Sus artículos y noticias siempre fueron un referente en nuestra sociedad, y ya quisieran otros diarios tener la seriedad que tiene ABC. Por eso mismo les ruego que sigan con su investigación», apunta SARA LORCA.
Sobre el editorial del pasado viernes, JOSÉ ÁNGEL AGUILAR escribe una nota para agradecernos su publicación. «Muy buen análisis: objetivo, referenciado, con metodología… Justo de lo carece la simil-tesis del señor Sánchez. Vivo en Suiza, pero me gusta seguir con interés (y preocupación) lo que ocurre en mi país. Esto es realmente indecente. Aquí en Suiza, o en Alemania, si ocurriera algo parecido, la dimisión sería inmediata, junto a excusas públicas. Pero ya vemos lo que está ocurriendo. Gracias por su trabajo». Al mismo texto se refiere ROQUE PÉREZ. «Chapó por este editorial. Les admiro. De ahora en adelante, mi admiración por ABC será constante. Adelante. Nos tienen a muchos con ustedes en la defensa de la verdad. Orgulloso de que en España haya un periódico como el suyo». Desde Costa Rica, MAYRA
RÍOS, perito auxiliar en Estadística del Poder Judicial, asegura que el software usado en La Moncloa «para establecer o no el plagio presumido en la tesis solo hizo la búsqueda, parece, en el material universitario de tesis de grado de doctorado similares en la temática». «Pero en esta tesis –añade– hay más fuentes de información que no se han examinado con ningún software de pareo de textos, ni se revisó toda la otra documentación de tipo institucional y escrito en otro idioma que también se utilizó. La conclusión que se da es parcial, y por tanto incompleta. Les felicito por lo que hacen».