Wizink, banco digital del antiguo Popular, despedirá a 210 empleados
Los bancos que operan en España siguen haciendo ajustes para mejorar su rentabilidad. También los nativos digitales. Wizink, entidad financiera que constituyó en 2016 el Popular junto al fondo Varde Partners con el negocio de bancopopular-e y de tarjetas de crédito del que fuera sexto banco del país, acometerá una reestructuración que implicará la salida de 210 empleados, el 15,5% de la plantilla del banco, formada por un total del 1.350 profesionales.
Varde Partners tiene a día de hoy el 51% del capital social de Wizink y el Santander, que absorbió este banco el año pasado al comprar el Popular, aún controla el 49%. Eso sí, el pasado mes de marzo el grupo presidido por Ana Botín acordó la venta de ese 49% de la filial a Varde, quedándose únicamente con el negocio de tarjetas de débito y crédito del antiguo Popular. La operación está previsto que se cierre antes de finales de este año.
Con esta reestructuración, la dirección de Wizink busca reducir duplicidades en distintas áreas y responde a la automatización y digitalización de varios procesos, así como a criterios regulatorios, según explicó ayer la entidad financiera en un comunicado en el que también indica que pretende «crear una organización más centrada en el cliente».
Este ajuste conllevará 210 despidos; de hecho, la compañía iniciará conversaciones formales con los representantes de los trabajadores en los próximos días para tratar de llegar a un acuerdo sobre las condiciones de este recorte de empleo.
Entidad en beneficios
Sin embargo, los sindicatos presentes en Wizink ya denunciaron a principios de este mes que en la entidad «no sobra plantilla, sino todo lo contrario», según CC.OO., central que apuntaba además a la necesidad de incrementar «sustancialmente» el número de trabajadores, fundamentalmente en las áreas con mayor carga de trabajo, según informa Ep.
Wizink, según los últimos estados financieros publicados por la Asociación Española de Banca (AEB), gestionaba al cierre del pasado mes de junio un total de 3.332 millones de euros en depósitos de clientes y 3.785 millones de euros en créditos. La entidad financiera, según esos mismos estados, ganó el año pasado 145 millones de euros, y en los seis primeros meses de este 2018 algo más de 65 millones.