El Gobierno aprobará este mes la reforma constitucional contra los aforamientos
∑ El jefe del Ejecutivo llevará la propuesta al Consejo de Ministros para abrir el debate
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció ayer que antes de que termine el mes de noviembre se llevará al Consejo de Ministros el proyecto de reforma constitucional que anunció en el mes de septiembre para suprimir los aforamientos políticos. Sánchez realizó este anuncio en un acto posterior al Comité Federal celebrado en el municipio madrileño de Fuenlabrada y que sirvió como proclamación de los candidatos autonómicos a las elecciones del próximo mes de mayo, en las que Sánchez auguró que el PSOE será la primera fuerza política de España.
Todavía queda pendiente la proclamación de los candidatos municipales, pero ahí la gran incógnita sigue siendo el candidato a la alcaldía de Madrid, aunque cada vez suena con más fuerza en el partido la posibilidad de que Sánchez piense en el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, una idea que ya valoró y que se frenó por su precipitada llegada a La Moncloa.
De manera inusual el PSOE no convocó a los medios para el Comité Federal y no hubo retransmisión del discurso ni del informe del secretario general ante el máximo órgano del partido entre congresos. Nada tuvo que ver con la organización habitual de estos cónclaves. El acto fue esencialmente un mitin en el que se dio la palabra a todos los secretarios generales autonómicos, en un esfuerzo por demostrar la unidad del partido detrás del presidente del Gobierno. No acudieron a la cita ni la presidenta de la Junta de Andalucía, por cuestiones de agenda institucional y de la precampaña de las andaluzas, ni el presidente de Aragón, Javier Lambán, que acababa de llegar de un viaje institucional a Shanghái. Tampoco el presidente de Asturias, Javier Fernández, que no repetirá como candidato y se ha apartado de las cuestiones de partido. Eso es en estos momentos el PSOE. Un partido sin oposición a Pedro Sánchez.
Durante su discurso ante los suyos, Sánchez cargó contra la oposición por haber «confundido la discrepancia con la crispación», y aunque consideró lógico que quieran desgastar al Gobierno reprochó que lleguen a «socavar los pilares de la convivencia y la paz social», asegurando que él no va a participar «en esa política pendenciera».
Poco antes se había jactado de que «hay algunos que se les ha atragantado el reloj con la moción de censura». El acto fue eso, un homenaje del PSOE al Gobierno y de Pedro Sánchez a sí mismo.
El líder socialista carga contra la oposición por «confundir la discrepancia con la crispación»