El TS pide a Interior que traslade a los presos del 1-O a Madrid antes del 28
Todo apunta a que el Tribunal Supremo cumplirá con el calendario previsto e iniciará el juicio contra los doce líderes independentistas del «procés» a finales de este mes de enero o principios de febrero. Así lo indica la comunicación que el presidente del tribunal del 1-O, Manuel Marchena, envió ayer al Ministerio del Interior en la que solicita que los procesados que están en prisión preventiva en cárceles catalanas (nueve de los doce) sean trasladados a centros penitenciarios de Madrid antes de la última semana de enero, fecha en la que ya deberán estar a disposición del tribunal. Se trata del exvicepresidente Oriol Junqueras; los exconsejeros Josep Rull, Jordi Turull, Raül Romeva, Joaquim Forn y Dolors Bassa; la expresidenta del Parlament Carme Forcadell, el expresidente de la ANC Jordi Sànchez y el presidente de Ómnium Cultural, Jordi Cuixart.
El señalamiento del juicio se conocerá dentro de unos diez días, una vez que finalice el plazo de presentación de los escritos de defensa (18 de enero) y que los magistrados hayan declarado la procedencia de la prueba solicitada por las partes, que pedirán la declaración como testigos de un millar de personas, entre ellas el expresidente Mariano Rajoy, la exvicepresidenta Soraya Sáez de Santamaría o el exministro de Hacienda Cristóbal Montoro. Sobre esta lista, el tribunal tendrá que valorar la pertinencia o no de las declaraciones en función del relato de hechos de Fiscalía y Abogacía del Estado.
Traducción simultánea
Otra de las cuestiones sobre las que tiene que decidir la Sala es sobre si accede al servicio de traducción simultánea que han pedido algunas defensas, una solicitud que no está exenta de crítica, pues los procesados no solo han utilizado el castellano durante toda la instrucción –rechazaron cualquier servicio de traducción–, sino que conocen la lengua oficial y son capaces de expresarse en ella sin necesidad de ralentizar el desarrollo del juicio, que ya de por sí se prevé largo.
Los doce dirigentes independentistas se enfrentan a penas de hasta 25 años de cárcel por los delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos. Aunque inicialmente eran 18 los que iban a ser juzgados por el Supremo, el pasado 27 de diciembre la Sala envió a seis de ellos –a los procesados solo por desobediencia– al TSJ de Cataluña.