Maduro se convierte en presidente «ilegítimo», aislado por la comunidad internacional
∑ El mandatario fue arropado solo por cuatro presidentes del eje bolivariano
Las calles de Caracas amanecieron ayer solitarias, como si fuera un día festivo o domingo. A la jura del segundo mandato de Nicolás Maduro apenas asistieron cuatro presidentes, más otros dos no reconocidos, y un puñado de seguidores chavistas del sector popular, llevados en autobuses, que corearon su nombre cuando entraba en el Tribunal Supremo de Justicia. Es la primera vez que un presidente venezolano no es investido en la Asamblea Nacional, como lo establece la Constitución venezolana, porque considera que Maduro es ilegítimo de origen y un usurpador del cargo para el período 2019-2025.
El pronunciamiento parlamentario oficial fue anunciado para ser público una vez terminara el acto de juramentación de Maduro. «Quiero comenzar un nuevo periodo para la revolución chavista, quiero cambiar todo para la felicidad socialista, corregir los errores», dijo Maduro al ofrecer un diálogo a la oposición y a la comunidad internacional, especialmente a la europea, que le ha dado la espalda.
La sede del TSJ se vistió con una alfombra roja por la que desfilaron Maduro y su esposa Cilia Flores, flanqueados por Maikel Moreno, presidente del Supremo. Su primera investidura de 2013 tuvo lugar en la Asamblea Nacional tras haber ganado al opositor Henrique Capriles por un margen mínimo y bajo acusaciones de fraude.
Maduro legitimó ayer su cargo tras haber ganado el 20 de mayo, con el 67% de los votos, unas elecciones presidenciales en las que la oposición no participó, y cuyos resultados no fueron reconocidos por gran parte de la comunidad internacional. A pesar de ello, en su discurso de investidura Maduro no dudó en considerarse «profundamente democrático» después de amenazar con disolver el parlamento legítimo e insultar a la comunidad internacional, especialmente a Estados Unidos, y de amenazar al Grupo de Lima.
Los mismos que mostraron ayer su rechazo a la juramentación, como el Consejo Permanente de la Organización Maduro fue arropado ayer por lo que queda del eje bolivariano, cuatro presidentes, más dos mandatarios de territorios no reconocidos por la ONU (Osetia del Sur y Abjasia)
Miguel Díaz-Canel Presidente de Cuba Daniel Ortega Presidente de Nicaragua Evo Morales Presidente de Bolivia Salvador Sánchez Cerén Presidente de El Salvador
Juan Manuel Nungaray Encargado de Negocios de la Embaja de México en Caracas Ilyas Umakhanov Vicepresidente del Consejo de la F. de la Asamblea Federal de Rusia Fuat Oktay
Vicepresidente de Turquía de Estados Americanos (OEA), que tras una reunión extraordinaria aprobó, con 19 votos a favor; seis en contra, ocho abstenciones y una ausencia, una declaración en la que considerada «ilegítimo» el cargo de Maduro.
Rechazo internacional
EE.UU. también mostró de manera inmediata su repudio condenando «la usurpación ilegítima del poder por parte de Maduro, después de las elecciones A la primera toma de posesión de Maduro, el 19 de abril de 20, acudieron 17 presidentes. Por España fue el presidente del Congreso, Jesús Posada.
Juan Manuel Santos Presidente de Colombia Raúl Castro Presidente de Cuba Cristina Fernández Presidenta de Argentina Evo Morales Presidente de Bolivia José Mujica Presidente de Uruguay Daniel Ortega Presidente de Nicaragua Dilma Rousseff Presidenta de Brasil Porfirio Lobo Presidente de Honduras Mahmud Ahmadineyad Presidente de Irán injustas y sin libertad que impuso al pueblo venezolano el 20 de mayo de 2018», afirmó el secretario de Estado, Mike Pompeo, en un comunicado, en el que ratificó que, para la Casa Blanca, la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, es la única institución legítima de Venezuela capaz de «iniciar un proceso transicional que restaure el orden democrático y constitucional con unas elecciones libres y justas que respeten la voluntad del pueblo venezolano». Por su parte, John Bolton, asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, aseguró, en su cuenta de Twitter, que «EE.UU. no reconocerá la toma de posesión ilegítima de la dictadura de Maduro. Continuaremos aumentando su presión sobre el régimen corrupto, respaldando la Asamblea Nacional democrática, y exigiendo democracia y libertad en Venezuela».
En la misma línea se expresó la Unión Europea, que no envió ningún repre-