El medallero
Parece un aviso de Memoria Histórica
ACasado le toman por un botones de Davos, pero al centro va y no va solo. Él dio el discurso contra Abascal porque había red. Su giro se va realizando; se incorpora Cs, que aclara el vino pepero, y con ello se acerca también un mundo neuronal sobrerrepresentado en los medios. El PP comenzará a disfrutar por fin el privilegio de ser un partido moderno y eurorracional.
Para esto es importante el PP de Madrid. El PP de Madrid es por donde le entra lo moderno. No es solo Ayuso, o no es Ayuso, es también y sobre todo su dimensión chic municipal, centrada, centrosa, centrista, con el alcalde Almeida a la cabeza, que es un hombre del partido (de Casado), impregnado de ‘ayusez’ (marcado un poco, pero no en lo malo por la gestión Covid) y con ese mundo referencial de Madrid: urbanita, de su tiempo, ‘cultureto’, colchonero y ¡libre!
El PP de Madrid concedió la medalla de honor municipal, entre otros, a Andrés Trapiello y el PSOE votó que sí con pegas. Tampoco es una «persecución», eh, aunque se hace extraño que llevándose medalla Ramoncín la polémica surja por Trapiello, pero así es: le llaman ‘revisionista’.
Esto ha servido para que algunos descubran en 2021 el sectarismo del PSOE. Ha molestado por sectario y por injusto porque el autor de ‘Las Armas y las letras’ no se lo merece. «¿Nuestro Trapiello eso? ¿Revisionista? Jajaja, qué ignorantes son en el PSOE. Ba-lon-ces-to, Pepu, balon-ces-to». Ni que fuera Pío Moa...
La sensación que da el PP (el PP prima, nuevo) es que va a llegar a la cultura prisaica cuando ya no importe. El asunto de Trapiello no es sectarismo o injusticia, que claro que sí, es sobre todo un supuesto práctico y un aviso de Memoria Histórica, asunto en el que el PP no ha estado precisamente heroico. Es lo que hay y, sobre todo, lo que puede venir. Que todo aquel que se separe de la historia oficial segregada por el Estado pase a ser considerado ‘revisionista’ e inhabilitado a continuación. Ahí parece que está el asunto, y no en una reputación concreta. Trapiello tendrá su medalla, por fortuna, porque no es sospechoso, pero ¿y los que sí lo son?