ABC (1ª Edición)

Los riesgos de volver a viajar sin revisar el coche tras meses parado

• El fin del estado de alarma pondrá de nuevo en marcha a millones de vehículos que conviene examinar para evitar sorpresas desagradab­les

- PATXI FERNÁNDEZ

El fin del estado de alarma coincide con la llegada del buen tiempo, anticipo de un verano en el que se prevé que millones de vehículos vuelvan a circular por las carreteras. Conviene tener en cuenta que en muchos casos han estado parados durante varios meses, por lo que antes de utilizarlo­s de una forma intensa conviene comprobar su estado, tanto para evitar averías como accidentes.

Según una encuesta realizada por Sixt, el coche va a ser el medio de transporte más utilizado para las próximas vacaciones y escapadas. Será usado por el 72% de los españoles, seguido del avión, con un 23%, especialme­nte para viajar a Baleares, Canarias o al extranjero. Antes de volver a conducirlo, no obstante, conviene realizar un mantenimie­nto básico y revisar que toda la documentac­ión esté en regla, además de disponer de un seguro en vigor y que la ITV no haya caducado. Una visita al taller y una comprobaci­ón por parte de mecánicos profesiona­les es siempre lo más recomendab­le, aunque también hay una serie de elementos que nosotros mismos podemos verificar. Según Antonio Lucas, director de Seguridad Vial del RACE, «la pandemia ha llevado a que muchos vehículos no cumplan con sus plazos de mantenimie­nto».

Antes de volver a circular hay que prestar especial atención a las ruedas, ya que su estado es fundamenta­l por conectar el vehículo con el asfalto. Hay que comprobar la banda de rodadura y que tienen la presión correcta. La falta de uso provoca pérdida de presión en los neumáticos, lo que puede incrementa­r la falta de agarre.

Si el coche ha estado parado mucho tiempo sin moverse también es posible que los neumáticos se hayan deformado. Además es importante verificar los discos y pastillas de freno y comprobar que el líquido de frenos esté en los niveles adecuados antes de salir de viaje. La necesidad de realizar el cambio de pastillas se suele señalar en un indicador luminoso del cuadro de instrument­os del coche.

Se aconseja cambiar el líquido de frenos cada 2 o 3 años y comprobar su estado anualmente. Un mal líquido ocasiona deterioro, sobre todo de los elementos del sistema de frenado que tengan retenes o juntas de goma, como la bomba de freno, los bombines de los frenos traseros y los latiguillo­s.

Para comprobar que la amortiguac­ión es la correcta, aplicaremo­s fuerza en cada una de las esquinas del vehículo, sobre cada una de las ruedas, para comprobar que no se producen rebotes bruscos.

En la batería se puede comprobar que no salga ningún líquido y que los bornes de contacto estén limpios, bien atornillad­os y protegidos con grasa. Antonio Lucas advierte sobre otro aspecto importante «ya que las hojas caídas sobre el coche durante este tiem

po pueden haber provocado humedad y afectar a los circuitos eléctricos».

Es fundamenta­l asegurarse de que todas las luces funcionan y que están reguladas y alineadas. Si el parabrisas tiene grietas o alguna rotura habrá que llevarlo a un centro especializ­ado para repararlo, y verificar las escobillas limpiapara­brisas. No nos podemos olvidar del nivel de aceite. Lo comprobare­mos con el motor frío utilizando la varilla indicadora.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain