La cabaña en el bosque del tiempo detenido
‘PETITE MAMAN’
Director: Céline Sciamma. Intérpretes: Nina Meurisse, Stephane Varupenne, Margot Abascal...
Aunque la película más celebrada hasta el momento de Céline Sciamma sea la sofisticada y envuelta en celofán ‘Retrato de una mujer en llamas’, hay algo de predilección y sabiduría en esta directora sobre el mundo de la infancia y adolescencia que le llevó a escribir un guion como el de ‘La vida de Calabacín’ y a dirigir películas como ‘Tomboy’ o esta que ahora se estrena, ‘Petite maman’, una historia de construcción sencilla y con vapores ‘mágicos’ en su interior que la convierten en una especie de cuento sobre las relaciones entre madre e hija en las que lo real, lo temporal, lo fabuloso (de fábula) adquiere una importancia extraordinaria en el relato sin que pierda por ello su aspecto de vida común, cotidiana y de juego infantil.
Ocurre cuando una niña, Nelly, pierde a su abuela y se va unos días a una casa en el bosque que fue el hogar infantil de su madre, y allí conoce a otra niña de su edad y muy parecida a ella físicamente (las dos pequeñas actrices, Joséphine Sanz y Gabrielle Sanz, son hermanas)… Ambas niñas comparten juegos y confidencias, además de la construcción de una cabaña entre los árboles en el mismo lugar en el que la madre de Nelly la construyó hace años. Sciamma puntea mediante detalles y casualidades la posibilidad de que eso tan normal de que dos niñas construyan una amistad pueda contener algo de asombroso (ya el título lo apunta: la pequeña mamá) y que descubra en ese mundo cotidiano un cruce de tiempos, sueños y deseos de conocerse una relación fantasiosa, imposible, entre madre e hija. En cualquier caso es una peliculita sobrecogedora y emocionante en su sencillez, y que muestra un mundo tan particular como universal.