¿Puede funcionar?
Este fin de semana se ha celebrado en Bilbao la trigésimo segunda edición de las tertulias hispanobritánicas. Uno de los paneles trató sobre el futuro de la economía. ¿Puede funcionar el actual planteamiento de tipos de interés bajos con la inflación repuntando?
Y quizás resulte pertinente, antes de abordar la pregunta, recordar por qué estamos en condiciones de plantearla. Y estamos en esas circunstancias porque hemos salido de esta crisis mucho antes y con pocas cicatrices. Nada comparable a crisis anteriores. Desde luego, nada que ver con la gran crisis financiera en la que tardamos diez años en volver a la casilla de salida.
Y esto ha sido así porque los ‘policy makers’ han estado a la altura de las circunstancias. Traían la lección aprendida y, a diferencia de la última, se han evitado los errores no forzados.
No solo eso. Tanto por el lado de la política monetaria como fiscal, en el caso europeo se ha dado pasos muy importantes que rompen con las inercias anteriores.
Los fondos europeos Next Generation por cómo están articulados, las contrapartidas que exigen en términos de reformas estructurales y el seguimiento que se tiene que hacer de su utilización pueden suponer el embrión de la por algunos ansiada Unión Fiscal de la UE.
La profunda revisión de la estrategia por parte del Banco Central antes de verano también constituye un enorme avance. El momento para sacarla adelante no ha podido ser más oportuno, ya que se están enfrentando a las recientes fuertes subidas de inflación sin una mano atada a la espalda.
A lo anterior hay que sumar unos ‘animal spirits’ que han recuperado con mucha fuerza y que ha cogido al reto de agentes económicos con el pie ligeramente cambiado, lo que está en gran medida detrás de los cuellos de botella y repunte de precios que hemos visto últimamente. Estos, por definición, son transitorios como ya estamos viendo en algunos indicadores.
Así las cosas, no tiene por qué no funcionar las cosas. Todo lo contrario, cada vez da más la sensación de que esta vez vamos a desaprovechar la ocasión de desaprovechar la ocasión.