Casado acusa al PSOE de revisionismo para cambiar la Constitución
► El líder de la oposición advirtió a los socialistas de que «el acuerdo es de todos»
El líder del Partido Popular, Pablo Casado, acusó ayer al Gobierno de Pedro Sánchez de promover un «revisionismo histórico», con el objetivo de cambiar la Constitución «sin contar con el PP y con parte de España a la que representa». Lo hizo durante la clausura del debate ‘Los Valores Constitucionales en la España del Siglo XXI’, organizado por el Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, junto a la Universidad Católica San Antonio de Murcia. En el acto, estuvieron presentes Miguel Herrero Rodríguez de Miñón, ponente de la Constitución, y Francisco Vázquez, exalcalde de La Coruña y diputado de la legislatura constituyente.
Durante su intervención, el líder popular quiso recordar la importancia de la Carta Magna sobre la construcción de una España democrática, donde «la Constitución no es el problema, la Constitución es la solución». Por eso, reclamó la necesidad de un «constitucionalismo militante» que «deje de mirar por el retrovisor y mire decididamente hacia adelante». Casado recordó que tendió la mano a Sánchez durante su investidura, ya que entendía que la labor del PSOE y el PP es «ensanchar juntos el espacio de centro para hacerlo de nuevo tan grande como para que el PP y el PSOE pudieran competir dentro de él, sin hacerse dependientes de los extremistas». «Es evidente que ha elegido hacer justo lo contrario, con efectos muy malos para su propio Gobierno, para su partido, para España y para Europa», aseveró el líder popular. Según Casado, desde el 2000 el PP ha ocupado un espacio de centro que ha puesto al PSOE en una «encrucijada: o competir con el PP por recuperar el centro, o buscarse nuevos socios en los extremos». A su entender, es evidente que con el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero se inició este último camino y que Sánchez ha seguido su estela.
Reivindicación de Europa
El jefe de la oposición arremetió contra la ley de Memoria Democrática que plantea el Ejecutivo porque arroja sombras sobre «la democracia española» y sobre «el fundamento del proyecto europeo», cuyo espíritu alentó la Constitución española.
Quiso, además, destacar el «vínculo estrecho» entre la Constitución de 1978 y el europeísmo: «La Unión Europea fue una pieza básica en el proceso de democratización de España. Es grave cuestionarla retóricamente y peor aún hacerlo por la vía de los hechos ignorando los compromisos adquiridos», aseveró el presidente popular. Es por eso que Casado quiso remarcar la irresponsabilidad de «poner en duda nuestra pertenencia a la Unión Europea».