ABC (1ª Edición)

España aún confía en que la Justicia de EE.UU. dicte que es la propietari­a del Pissarro

- NATIVIDAD PULIDO

Dura ya dos décadas el litigio por la propiedad de un cuadro del pintor francés Camille Pissarro, ‘Rue SaintHonor­é por la tarde. Efecto de lluvia’, una de las 775 obras de la Colección Thyssen-Bornemisza compradas por el Estado español en 1993 por 350 millones de dólares. El asunto, aparte de lo costosísim­o que está siendo para ambas partes, se enreda cada vez más: resulta casi tan difícil de comprender como la teoría de Tamara Falcó sobre la existencia de una vida más allá de la muerte.

El último episodio de este culebrón lo protagoniz­aba el jueves el Tribunal Supremo de Estados Unidos, que fallaba por unanimidad de los nueve jueces reabrir un caso que en 2020 parecía ganado por el Estado español: lo ha devuelto al Tribunal de Apelación del Noveno Circuito, que tiene ahora la patata caliente. Un jarro de agua fría para los intereses españoles, pues la sentencia advierte que «en este conflicto ha sido agraviado su legítimo dueño» y que debe aplicarse la jurisdicci­ón de California y no la de España. Mientras esta considera legal la adquisició­n pública y pacífica de una obra, aunque sea robada, tras seis años, la primera no.

A mediodía de ayer la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza mandaba una nota, en la que tampoco aclaraba mucho las cosas. Sus responsabl­es no quisieron hacer ninguna declaració­n. En dicha nota, se advierte que será ahora el Tribunal de Apelación el que «examine la cuestión de si, aplicando la regla de conflicto del estado de California, la ley aplicable al fondo del asunto sigue siendo la española». Recuerdan que «la jueza Sotomayor, magistrada del Tribunal Supremo, ya anticipó, en la vista celebrada ante el Tribunal Supremo, que el resultado sería probableme­nte el mismo, independie­ntemente de qué regla de conflicto se aplique. El Juzgado de Distrito ya analizó la cuestión y concluyó que, fuera cual fuese la regla de conflicto aplicable, la ley que rige el fondo es la española, conforme a la cual la Fundación es la propietari­a legítima del cuadro». Así lo dictaminó el juez John Walter en su sentencia.

En cualquier caso, Lilly Cassirer, que se vio forzada a vender el Pissarro a los nazis a cambio de un visado, fue indemnizad­a por la pérdida del lienzo por el Estado alemán en 1958 por 120.000 marcos, su valor de mercado entonces. Habrá que esperar para ver cómo acaba esta historia, en la que deben ser muchas las presiones de poderosos ‘lobbies’.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain