«Ni consenso ni ayuda a la concordia»
José Rodríguez de la Borbolla Expresidente de Andalucía
José Rodríguez de la Borbolla se afilió al PSOE en 1972, en la clandestinidad a la que forzaba el franquismo. Cinco años después, con la Transición recién estrenada, se convirtió en secretario general del partido en Andalucía. Fue senador entre 1979 y 1982, año en el que tomó posesión como consejero de la Junta de Andalucía, gobierno autonómico que acabó presidiendo durante seis años, entre 1984 y 1990. Fue, por tanto, parte activa de la Transición y de la consolidación democrática. Ahora, desde ese privilegiado activo, se cuenta entre los firmantes del manifiesto contra la ley de Memoria porque, dice a ABC, «no nace desde el consenso ni contribuye a la concordia» sino a cuestionar el régimen democrático nacido precisamente de una ejemplar reconciliación nacional.
«La memoria democrática debería ser un instrumento para un doble objetivo: cerrar un pasado sucio e impulsar la mejor convivencia de la sociedad actual», afirma Rodríguez de la Borbolla. Pero a ninguno de los dos fines contribuye la que ha pactado el PSOE de Sánchez con los radicales, porque es una ley «que no ha sido ampliamente consensuada y, tal y como se ha conformado, es el proyecto de una parte del país contra otra». Además –apunta– en ella «pesa» negativamente la mano de Bildu, partido que sigue renegando del régimen democrático del que disfruta España y que «llega a decir que la Constitución no se votó en el País Vasco, lo que es totalmente falso: hubo una abstención muy alta, pero ganó el ‘sí’: esa es la verdad histórica».