«La enfermedad mental tiene que dejar de ser un tabú»
∑ Pacientes y familiares de afectados quieren acabar con el estigma social que les rodea
Durante la I Jornada «Imagen de la salud mental en los medios de comunicación», evento organizado por la asociación Barandilla y ASISPA, quedó patente que en la sociedad reina una imagen «paleolítica» de los enfermos mentales.
Toni Ocaña, un joven diagnosticado hace cinco años por padecer Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) y socio de la entidad Tú Decides, apuntó en su intervención que «en el trato de la enfermedad mental no se ha avanzado en nuestra sociedad, sigue siendo un tabú. Los afectados somos un colectivo muy numeroso, y bajo el paraguas de salud mental, hay muchas enfermedades y trastornos. Se nos debería tener en mayor consideración».
Lamentó que se ofrezca una imagen «criminalizada» de los afectados cuando solo un 3% de ellos pueden resultar violentos si no toman la medicación adecuada. «He visto muchos titulares en los que se dice que un esquizofrénico –un perturbado, un desequilibrado..., términos, además, inadecuados– ha matado a una persona, pero nunca he leído un titular semejante diciendo que un diabético, un hipertenso o una persona con cáncer ha matado. ¿Por qué? ¿Por qué se hace con los enfermos mentales, cuando hay una parte mucho mayor de la población que comete estas atrocidades y no son enfermos mentales? ¿Por qué esta tendencia a relacionarlo?», se preguntaba.
«Salir del armario»
Ángel Antonio, ingeniero, locutor del programa radiofónico «Conecta con nosotros», explicó de manera muy emotiva cómo ha sido su vida desde que le diagnosticaron esquizofrenia de joven. «Cuando la enfermedad empezó a hacerse dueño de mí, pensé que no merecía la pena vivir», aseguró. Sin embargo, su capacidad de lucha y tesón le han permitido echar un pulso a la esquizofrenia y, hoy por hoy, lleva una vida normalizada, y asegura que «me siento más feliz ahora que antes de ser diagnosticado porque me conozco mejor y por todo lo que he logrado superar».
También resaltó que la imagen que se proyecta de las enfermedades mentales, si es positiva, «ayuda en gran medida a la rehabilitación de los afectados, por eso es tan importante que sea una información cuidada y rigurosa».
En su turno de palabra, Ricardo Guinea, presidente de la Asociación Mundial de Rehabilitación Psicosocial, apuntó que desde el cine —películas como «Psicosis»—, o series de ficción pasadas y actuales, se ha fomentado una imagen de la enfermedad mental asociada con la peligrosidad y violencia. «Aunque es verdad que, poco a poco, va cambiando y algunas series y películas introducen personajes con alguna patología alejada de esta violencia. Pero aún queda mucho por hacer».
Entre sus propuestas destacó la de realizar más jornadas en las que se hable del asunto, fomentar la visibilidad de la enfermedad en el día a día de los afectados para mostrar que pueden llevar una vida más o menos normalizada, hablar con los expertos para acabar con mitos, mostrar ejemplos de pacientes que son una verdadera lección de vida... «Es importante mostrar la realidad de los afectados y familias y, sobre todo, lograr, de una vez por todas, que los enfermos mentales “salgan del armario”», puntualizó.