Aguayo se parapeta tras sus técnicos en el juicio del caso ERE
La ex número dos de Griñán declara que «a su mesa» no llegaron avisos del interventor
Carmen Martínez Aguayo, ex número dos de José Antonio Griñán cuando éste era consejero de Hacienda, se parapetó tras sus técnicos y los interventores para justificar su inacción ante las irregularidades detectadas en el sistema de la Junta de Andalucía para subvencionar pólizas de prejubilación. Durante el juicio de la pieza política del caso ERE, quien fuera viceconsejera andaluza de Hacienda y consejera del ramo desde 2009 hasta
2013 declaró que «por mi mesa no pasaron» los informes de la Intervención General de la Administración autonómica en los que alertaba de que la Consejería de Empleo estaba utilizando un método inadecuado para financiar las ayudas sociolaborales y a empresas en crisis.
La Audiencia Provincial de Sevilla trata de determinar si la antigua cúpula del Gobierno andaluz desactivó los controles de forma deliberada para repartir arbitrariamente 855 millones de euros en ayudas entre 2000 y 2010. En el banquillo se sientan 22 ex altos cargos andaluces, entre ellos los expresidentes Chaves y Griñán.
Aguayo, que se enfrenta a una petición de seis años de prisión y 30 de inhabilitación, salió al paso de las incisivas preguntas del fiscal asegurando que tales informes eran leídos por su equipo técnico y que ni sus subordinados ni la Intervención «me advirtieron de ilegalidad alguna ni requerimiento de actuación». Dichos documentos eran dirigidos de oficio a la Viceconsejería de Hacienda que ella ocupaba «para su puesta en conocimiento» del consejero, en este caso Griñán. Sin embargo, aseguró que no lo despachó con él porque no se había detectado «menoscabo de fondos públicos». En abril de 2015, Aguayo había declarado ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía que no se leyó los informes de la Intervención porque recibía más de cien al año y nunca entendió que hubiera que hacer nada. Ahora da un paso más y sostiene que ni siquiera llegaron a sus manos los avisos del interventor.
La exconsejera recurrió a expresiones como «ya le he dicho que no» o «usted está mezclando cosas» para contestar al fiscal Manuel Fernández Guerra. El tribunal le recriminó por ello que usara un «tono arrogante que no es el adecuado» para una acusada. Aguayo acabó pidiendo disculpas.
CARMEN M. AGUAYO EXTITULAR DE HACIENDA «Ni los interventores ni los técnicos me advirtieron de ilegalidad alguna en las ayudas»