El fugado da «unas semanas» a Sánchez antes de dejarlo caer
Los gestos, las ofertas, la mano tendida, no parecen dar resultado. La estrategia de desinflamación primero, y oferta después, que propone el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recibe el desprecio como respuesta por parte del independentismo. El expresidente de la Generalitat catalana Carles Puigdemont exige al jefe del Ejecutivo diálogo para solucionar la cuestión catalana, a la vez que le dijo que se le «acaba» el tiempo.
Puigdemont advirtió al presidente de que si no presenta ya una oferta para Cataluña, «en unas semanas» podía perder la mayoría en el Congreso. Puigdemont volvía así a poner sobre la mesa la amenaza que en su momento formuló el presidente Quim Torra, que aludió a noviembre como plazo límite para dejar de apoyar al Gobierno en el Congreso.
«Cuando decidimos apoyar a Pedro Sánchez, esperábamos una nueva receta. Tras varios meses ha mostrado su incapacidad para explicar si tiene o no un proyecto para Cataluña. El tiempo se ha acabado. ¿Está usted en el mismo camino que Mariano Rajoy o va a establecer una nueva vía?», dijo Puigdemont en una conferencia en las Islas Feroe, un territorio autónomo que forma parte de Dinamarca.
Estatuto, no
Mano tendida
En la misma línea, el presidente Torra advertía ayer a Sánchez de que la época de negociar nuevos Estatuts está «superada», por lo que le exigió que se abra a pactar un referéndum de autodeterminación en Cataluña, apuntó en alusión a una supuesta oferta de más autogobierno para Cataluña: «Los catalanes votamos en un referéndum de autodeterminación el 1 de octubre y declaramos políticamente la independencia el 27 de octubre. Lo único que puede cambiar esta situación es un referéndum sobre la independencia pactado y acordado».