Oriol Pujol ingresa en la cárcel, condenado por corrupción
El único hijo del expresident que intentó seguir la carrera política de su padre ya está entre rejas. Eran las cuatro de la tarde de ayer cuando Oriol Pujol entraba a pie en la cárcel de Brians 2, en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), para cumplir condena por corrupción. La Audiencia de Barcelona le había condenado a dos años y medios de cárcel por haber usado su influencia política para cobrar comisiones ilegales a cambio de favorecer a sus amigos empresarios del sector de las ITV en Cataluña.
Su ingreso era cuestión de días después de que, tal y como avanzó ayer ABC, sus abogados renunciaran a la última bala para su defensa: un recurso de amparo, que habría de presentarse al mismo tribunal que ordenó su encarcelamiento y, por tanto, con pocas opciones de prosperar. Y es que la Audiencia ya había echado por tierra el intento del exconvergente de conmutar la cárcel por trabajos sociales, y le ordenaba entrar en prisión por la «gravedad» de sus delitos: cohecho, tráfico de influencias y falsedad documental.
Pujol había admitido los hechos y pactó con el fiscal la pena. Al acuerdo se sumó su mujer, Anna Vidal, también encausada, pues a través de ella cobraba las comisiones. Vidal, al poder rebajar su pena con el pacto, sí que ha logrado evitar la cárcel. La pena que el fiscal pedía para ella era menor que la que reclamaba para él.