El viento de Poniente coloca al «Azzurra» líder en Puerto Sherry
la plantilla blanca. James termina contrato en el verano de 2021 y el Madrid es consciente que debe venderlo en este mercado para sacar de él un buen traspaso. El Nápoles de Carlo Ancelotti, que ya lo tuvo en el Madrid y en el Bayern, es el destino elegido por el cafetero, y el propio presidente de la entidad italiana, De Laurentis, ha confesado el interés: «James será caro, pero si tenemos que hacer un sacrificio, lo haremos. Si podemos mejorar, lo haremos, pero sin locuras que nos pongan en peligro en el futuro».
El precio del futbolista es de 50 millones de euros, pero el Nápoles quiere disfrazar esa compra en un primer año de cesión en el que abonaría 10 y una opción de compra obligatoria para el verano de 2020 de 40 millones, propuesta que no es del agrado del Real Madrid, que quiere el abono completo del traspaso en este mercado. Diferencias en la negociación que en ambas entidades no consideran insalvables. Si no hay un giro inesperado de los acontecimientos, James será una de las ventas más jugosas del Real Madrid este verano.
Ventas más complejas
Tras Llorente, Raúl de Tomás y James, los laterales Theo y Reguilón, sin sitio con la permanencia de Marcelo y el fichaje de Mendy, miran ya a un futuro fuera de la capital de España. Por el lateral galo la Juventus estaría dispuesta a pagar 25 millones, justo lo que abonó el Madrid hace dos años al Atlético. Mientras, el canterano está cerca de cerrar una cesión al Sevilla sin opción de compra. En la entidad de Concha Espina se confía mucho en Reguilón de cara al futuro.
Ceballos, Lucas Vázquez, Luca Zidane, Vallejo y Mariano son otros cinco jugadores por los que el Madrid espera hacer caja, aunque sus hipotéticas ventas están más verdes. Como las de Bale, Keylor, Kovacic e Isco. Cuatro jugadores con caché, pero con sueldos muy altos que dificultan sus ventas. Seguramente, estas se alargarán en el tiempo, pero de momento el Madrid ya tiene varios frentes abiertos que acelerarán la operación salida en los días venideros. Saltó el Poniente en la bahía de Cádiz y el argentino «Azzurra» cogió el liderato de la 52 Super Series Royal Cup, que se está celebrando en Puerto Sherry. La bahía gaditana mostró su cara más amable con una intensidad de 11 a 14 nudos de viento de Poniente puro y con olas de más de medio metro, que realzó las dos mangas que se disputaron.
Con el «Azzurra» a las puertas del liderato y el «Quantum» cerrando la clasificación, la jornada prometía ser interesante. Se disputó una primera manga muy competida entre el «Sled», que hizo una gran salida con un genial Ray Davies a la táctica, y el «Quantum» y el «Azzurra» porfiando durante la primera ceñida. La llegada a barlovento fue muy interesante con estos tres barcos a la cabeza y con los americanos muy hambrientos.
Popa muy rápida
La popa fue muy rápida y en la puerta de sotavento «Quantum» se hizo con los mandos de la regata tras un larguísimo tramo de ceñida. En la primera virada, el «Azzurra» viró en la proa del «Sled» obligándole a virar y, por tanto, relegándole a la tercera plaza. Ahí se acabó la manga, y con la contundencia del «Quantum», la agresividad del «Azzurra» y la resignación del «Sled» ya no cambiarían los puestos en la siguiente popa rumbo a la llegada.
El séptimo puesto del turco «Provezza» les daba el liderato a los argentinos, que salieron muy bien en la segunda manga y supieron defender una memorable primera ceñida, que les llevaría a la victoria final de la segunda manga. Los de Guillermo Parada habían merecido esta victoria y, a la postre, el liderato de la Royal Cup, que de momento está siendo muy competitiva.
Por su parte, el «Quantum» volvió a dar, una vez más, la de arena en esta segunda manga al ocupar la séptima plaza final. No se puede ser tan irregular, aunque han dejado el farolillo rojo, que lo ha recogido el «Phoenix 11».