Blanca Suárez «Mario y yo nos vemos siempre que podemos»
La actriz habla por primera vez de su relación con el actor y de sus planes de verano
Se podría decir que Blanca Suárez atraviesa un momento de abundancia. A sus 30 años, la actriz no para de trabajar y, en lo sentimental, junto a Mario Casas, vive una época tranquila y feliz. Al actor le conoció en 2011 durante el rodaje de la serie «El barco». Se hicieron entonces buenos amigos y, en octubre de 2018, su relación evolucionó en un noviazgo que ellos nunca han querido confirmar. Sin embargo, ayer, durante la presentación de la nueva colección de verano de Women’secret, Suárez sorprendió a todos hablando con naturalidad de su relación con Casas.
Antes de estar juntos, Suárez y Casas ya eran muy recelosos con su vida privada. Una actitud –la de no hablar sobre sus temas amorosos– que han mantenido desde 2018, pese a que han sido muchas las ocasiones en que un paparazi les ha pillado por las calles de Madrid. Tan a rajatabla siguen esta norma que, hasta la fecha, ninguno de los dos ha publicado una imagen donde aparezcan juntos en sus respectivos perfiles de las redes sociales. De hecho, el pasado mes de abril viajaron a Tanzania y ambos subieron imágenes por separado y con las mismas ubicaciones, lo que provocó que incluso este periódico recogiera las instantáneas afirmando que, en el caso de Casas y Suárez, ellos preferían ser sus propios paparazis.
Escapadas estivales
Este verano Suárez echará de menos tener un viaje así. Inmersa en el rodaje de la quinta temporada de «Las chicas del cable», durante los próximos meses no podrá cogerse demasiados días para desconectar. «No tengo muchos planes de verano porque lo voy a dedicar bastante a trabajar y a rodar. Así que intentaré sacar tiempo libre algún fin de semana».
Respecto a si algunas de esas escapadas las realizará junto a Casas, la actriz expuso que aún no lo sabe, pues el actor también tiene que cumplir con numerosos proyectos profesionales: «Mario está trabajando ahora mismo. Los dos estamos trabajando, por suerte. Ya nos
«Me voy acostumbrando a las críticas. No se puede gustar a todo el mundo, lo único que pido es que haya respeto»